Enamorado de mi Jefe Overhaul x Chonostasis

23&24

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[Perspectiva: Kurono]

Esta nervioso.
Puedo sentirlo.
Sus labios están tensos.

Solté uno de sus brazos y solo se limito a dejarlo sobre la cama...
¿No quiere tocarme?

Puedo sentir su respiración agitada.
¿Le gusta o está enojado por el contacto físico?

No.
No creo que sea por lo segundo.
Si fuera por eso no permitiría que siga tocando su cuello.

Bajo mi mano, acariciando su pecho...
Kai se estremece con cada caricia.
Es hermoso.
Esta vez voy a continuar, necesito continuar.

Tomando un poco de distancia, el peliblanco bajo desde los labios hasta el cuello de su Jefe, besándolo repetidas veces.

El castaño estaba un poco incómodo por obvias razones pero no ponía resistencia alguna, suspiraba de vez en cuando, sintiendo la mano de su compañero bajando, acariciando su abdomen.

Acomodando mejor su cuerpo sobre él, Kurono sintió la erección de su Jefe en su pierna y se dejó llevar, mordiendo el cuello de este.

Al sentir los dientes de Kurono sobre su piel, Chisaki suspiro otra vez, poniendo su mano en la cabeza del peliblanco, agarrando con fuerza su cabello.

-M-Maldito seas, Hari- Susurro el castaño, moviendo su cabeza, dejando a total disposición su cuello.

Kurono lamio el cuello de Overhaul y bajo hasta el pecho de este, besando su piel, dispuesto a continuar.
-Eso se sintió bien ¿No?- Respondio entre besos, soltando el otro brazo de Chisaki, bajando su mano para acariciar el abdomen de este.

-Se siente... Raro- Contesto el castaño, en voz baja, nervioso.

-Pero ¿Te gusta?-

-S-Si, eso creo- Susurro Chisaki y suspiro, sintiendo los labios de su compañero besando su pectoral derecho.
Soltó el cabello de Kurono y dejo su mano sobre la cama nuevamente.

-Quiero complacerlo, Jefe- Dijo el peliblanco, bajando aún más, besando el abdomen de Chisaki.

El castaño no pudo responder a eso, solo se limito a levantar un poco su cuerpo, apoyando sus codos sobre la cama, observándolo.

Las manos de Kurono tomaron el elástico del pantalón, bajandolo.
Sin detener sus besos, los labio de Kurono descendieron, besando el bajo abdomen de su Jefe.

El castaño lo miraba, curioso, sin saber que pasaría.

¡Vamos!
Que no es tan difícil adivinar lo que Kurono tenía en mente hacer.
Chisaki acostado, con las piernas abiertas y entre ellas, la cabeza del peliblanco...
Pero claro, el joven Jefe nunca mantuvo este tipo de contacto con otra persona.
Entre el trabajo y su misofobia, nunca sintió el deseo o la curiosidad de tener algún contacto íntimo.
Overhaul estaba nervioso, pero los besos que recibía en su abdomen le provocaba un cosquilleo agradable.

A centímetros de la intimidad de su Jefe, Kurono seguía besando el bajo abdomen de este, juntando valor para continuar...

Si, moría de ganas por practicarle sexo oral, pero no era cualquier persona con la que estaba, era su Jefe, su compañero, el joven que conoce hace años.
Tampoco era la primera vez que lo hacía, por supuesto que no.
Pero, en este caso, era diferente.
Estar con Chisaki es totalmente diferente.

Con ambas manos, el peliblanco sostuvo las piernas de su Jefe y las apreto levemente, juntando valor.

Al sentir las manos de su compañero, El sonrojo en el rostro de Kai era más notorio pero, aún así, no se inmutó ni puso resistencia alguna.