_Narra Meize_
Estoy en el hospital después de bajar del avión, no pude contarles a las chicas lo que me sucedió por temor a que ese hombre nos hiciera algo.
Mis nervios estaban a mil y no podía cerrar mis ojos porque sentía su mano acariciando mi muslo y el escalofrío se apodera de mi. Estaba tan agitada que mi ritmo cardíaco estaba acelerado y me tuvieron que tranquilizar.
-Y así nuestra querida amiga le da la bienvenida a México, conociendo primero su hospital. - las chicas no paran de burlarse de mi y no me importa, porque no sé cómo actuarían ellas al pasar por lo mismo que me paso a mi.
Me dieron de alta y decidimos irnos a comer para luego ir a la cabaña donde nos estamos hospedado.
Es un lugar muy hermoso. La playa te da la bienvenida en cuanto abres la puerta y un gran bosque esta a espalda de la cabaña. Estamos rodeado de pura naturaleza.
- Vamos Meize, vamos al agua. - las chicas corren al mar y por un momento me emocione pero al ver a sus novios detrás de ella mi ánimo bajo de inmediato.
- Vayan ustedes yo tengo algo más que hacer. - obviamente es mentira pero a las chicas no les importó porque están con sus novios, fue mala idea haber venido.
Me senté en el sofá de la Sala y revise mi teléfono, tenía varios mensajes y todos de mi familia, claro porque mis amigas están en el mismo viaje conmigo.
Iba a responder a cada uno cuando la puerta se abre y de ella aparecen dos hombres con armas y comienzan a revisar la casa y uno de ellos me toma del brazo.
-Mira a quien encontré. - el otro tipo que revisaba la cabaña regresa y me observa y sonríe de manera maliciosa.
-Esto le va a gustar a Adriano. - no entendía nada pero sus palabras me alertaron a salir corriendo y eso hice. Salí como lo haría flash pero alguien estaba en la entrada de la cabaña y esa persona me detuvo.
- Espera presiosa, tranquila. - un sujeto con rostro y cuerpo bien parecido me abraza. - Solo estamos revisando el lugar porque es propiedad privada y no pueden estar aquí.
- Propiedad privada? Eso no puede ser, nosotras alquilamos el lugar. - los hombres que están en la casa salen corriendo y al verme se tranquilizan y uno de ellos se acerca al muchacho guapo que me sostiene para hablar con él.
-Esto se pone interesante. Deja que me presente cariño, mi nombre es Antonio y mi hacienda esta del otro lado de esta montaña, que te parece si vamos y mientras almorzamos hablamos sobre la cabaña, tal vez y pueda dejar que se queden en ella.
~~~ Amiga que te puedo decir, si vas con él vas a entrar a la boca de los Leones 🦁 y ese León es muy feroz. ~~~~
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El matrimonio del mafioso depredador
RomanceAdriano Santoro hijo de Máximo Santoro o mejor conocido como el diablo, el rey de la mafia Italiana y Nirvana Volkov la majestuosa maestra que se ganó el respeto de todas por educar a una bestia sin control. por si no han leído la historia de sus p...