Prólogo

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"Quizás cometiste errores en tu pasado, pero en el presente puedes cambiarlos."

La iglesia estaba totalmente iluminada por la luz solar que entraba por las grandes cristaleras con diferentes diseños, hacia un clima perfecto en Mónaco mientras el británico se encontraba parado en el altar siendo acompañado por sus caballeros d...

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La iglesia estaba totalmente iluminada por la luz solar que entraba por las grandes cristaleras con diferentes diseños, hacia un clima perfecto en Mónaco mientras el británico se encontraba parado en el altar siendo acompañado por sus caballeros de honor y al lado contrario los del castaño, todos portando con un elegante traje color negro a excepción del novio que portaba un caro y elegante traje color blanco hueso con un broche en una de las solapas de este.

Ya faltaban pocos minutos para que la boda diera inicio, los nervios carcomían al moreno pero había una mirada entre la gente que se lo estaba comiendo vivo, el sabía de quien se trataba pero no estaba dispuesto a mirarlo, suspiró cuando la melodía suave del grupo de música empezó a sonar y las personas se levantaban de las bancas, era señal que la boda daba inicio.

Lewis dirigió su mirada a la gran puerta de madera que era lentamente abierta y así dejando ver al bonito mexicano, el cual lucía más que hermoso con su traje blanco. Al lado de Sergio se encontraban sus dos padres, Antonio Pérez y Marilú Mendoza, quienes tomaban de ambos brazos a su hijo, mientras caminaban juntos al altar.

Sergio temblaba de los nervios, se supone que ese era el día más importante de su vida con la persona que él más amaba, se sentía externo a esta situación, sin saber que el amor de su vida no era la persona que lo esperaba en el altar. El mexicano sonrió al encontrarse con la mirada radiante del moreno, tranquilizándose un poco.

- Creo que vomitare -Hablo el mexicano sin dejar de caminar.

- Tranquilo, todo saldrá bien -Dijeron al unísono los padres de Sergio.

Cuando por fin llegaron al altar en donde ya estaba Lewis y sus acompañantes esperándolo. Los padres del castaño tomaron las manos del británico mientras Sergio se colocaba en su lugar quedando frente al moreno, el cual hablaba con sus padres.

- Lewis confiamos en el amor que le tienes a nuestro Sergio y por eso te lo entregamos hoy, cuídalo, protégelo y ámalo... pero por favor, si un día dejas de sentir ese amor no le hagas daño a nuestro hijo, solo regrésalo a salvo con nosotros -Finalizaron, mientras la señora Marilú dejaba una rápida persignación en el moreno.

- Juro que siempre cuidaré de Sergio, él es el amor de mi vida-. Volteó a ver al mexicano, quien lo miraba con alegría y al mismo tiempo nervioso, le sonrió.

Los señores limpiaron las lágrimas que empezaban a salir de sus ojos, abrazaron a Hamilton y se colocaron al lado de su hijo. Lewis y Sergio se tomaron de las manos, dando inicio a la ceremonia. El padre se puso en medio de ellos y ambos voltearon a mirarlo.

- Hoy hermanos y hermanas, nos encontramos aquí para unir en sagrado matrimonio a estas dos almas -Dice el padre-. Sergio Michael Pérez Mendoza y Lewis Carl Davidson Hamilton, ¿Vienen a contraer matrimonio sin ser forzados, libres y de manera voluntaria?

I Will Always Be For You | ChestappenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora