Namjoon es tu entrenador personal pero...🔞

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Pov's Namjoon

Me sentía mal por mentirle a __, porque realmente no iba a trabajar ni nada por el estilo

Después de lo que me dijo de Jungkook no pude evitar enojarme, tenía que hablar con él

Anteriormente ya le había dicho que no se metiera con ella, sin embargo lo hizo, y esto no se lo pensaba perdonar

Después de despedirme fui directo a su casa, para mi sorpresa si estaba, tardo un poco en abrir pero lo hizo.

-Hyung, no te esperaba, pasa

-está bien, seré rápido

-¿que ocurre?

-es sobre__

-oh..ella, dios Hyung, ¿podrías darme su número? Esta demasiado buena, ayer casi la hacía mía pero me termino corriendo y bueno..

-¿que carajo te pasa? Te dije que no te metieras con ella, y es la última vez que te lo advierto, no me importa a quien te estés cogiendo, pero te dije que ella estaba prohibida para ti, y si te vuelves a acercar a ella ya no será una plática.

Salí furioso de ahí dejándolo con la palabra en la boca, realmente no tenía sentido escuchar sus estupidas excusas otra vez

Porque sabía que si lo hacía, esta vez no me controlaría

[...]

Escuché unos toques en mi puerta, pasaban las 5:00 p.m, me encontraba con un short y una camisa de tirantes

En ese momento me encontraba comiendo ua que Namjoon me dijo que llegaría algo tarde...

Al abrir la puerta me quede un poco confundida

-¿no ibas a llegar más tarde?

-termine antes, y quise sorprenderte

-pasa

Me hice a un lado para que pasara, una vez más pude sentir su perfume, dios, cuánto lo amaba.

-¿tienes hambre?

-algo

-déjame servirte algo

No deje que respondiera y me dirigí a la cocina, tome un plato y me dirigí a la estufa, donde había dejado la comida

Mientras servía la comida pude sentí unos brazos rodear mi cintura, haciendo que deje el plato a un lado

-¿que sucede?

-me gustaría empezar por el postre primero

-p-pero...

No me dejo decir más, ya que había atacado mis labios con un beso tierno, que cada vez fue subiendo la intensidad

A tropiezos fuimos caminando hasta la sala para sentarnos en el sillón, yo quedando sobre el

No podía negarlo, que tuviera la iniciativa tan de repente me calentaba de sobre manera

Sus fuertes manos sujetando mi cintura mientras masajeaba mi cuerpo a su antojo me iba mojando cada vez más

Los movimientos sobre su ya, más que duro miembro me hacían perder el control

-¿papi quiere follarme?

-papi va a dejarte temblando, bonita

Arranco mi ropa en cuestión de segundos, ya no podía más así que termine quitándole la camisa dejándome ver su trabajado cuerpo

No pude evitar morder mi labio, ya quería probarlo

Sin perder un segundo más dirigí mis manos hacia sus ya molestos pantalones, para bajarlos junto a sus bóxers, lo suficiente para que su pene chocara con su abdomen.

-¿puedo?

-come.

Comencé masajeando la punta con mi lengua, hasta el borde de este para masajearlo en círculos

Fui aumentando la velocidad, supuse que lo estaba haciendo bien cuando formó una improvisada coleta con sus manos, dirigiendo el movimiento

Todo lo que se escuchaba eran sus jadeos y mis gemidos ahogados por su miembro en mi boca.

-joder__—dijo ronco

Sentí su miembro palpitar, sabía que estaba cerca así que lo hice más rápido para que terminara en mi boca.

Una vez que trague todo, dirigí mi mirada hacia él, estaba con una ligera capa de sudor tratando de recuperar el aliento

-parece que ya no puedes más, mejor lo dejamos así— dije en tono burlón

Me tomo de la mano para jalarme y así quedar sobre él, haciendo que nuestras intimidades choquen.

-móntame.

-¿eso quieres?

De un movimiento posicionó su miembro en mi chorreante entrada, haciéndonos soltar un jadeo a ambos

Sin más, entró de una solo embestida

-¡dios, es tan..ah!

Comencé a mover mis caderas hacia adelante y hacia atrás, de forma rápida mientras el sostenía mis caderas

Probablemente querían marcas, pero no importaba

Tomo mis piernas y las separó, había quedado confundida hasta que sentí sus dedos moverme rápido en mi zona

-¡si, ahí, mierda!

Estuvimos unos minutos más así, hasta que quedamos sobre el sofá, yo sobre el mientras daba ligeras caricias a mi espalda

-lamento si fui muy duro

-está bien, me gusto...

-¿con que te moja el trato rudo eh?

-demasiado.

Nos quedamos en silencio unos segundos, podía sentir sus latidos al estar sobre su pecho

Al fin había pasado..