Exulansis

Irrisorio

-Príncipe -la doncella ingresó a la habitación sin solicitar permiso- el rey solicita su presencia en el salón azul de inmediato.

Dicho aquello, se marchó dejándolo sin oír respuesta era normal que nadie tuviera el más mínimo respeto hacia su persona, pese a ser el príncipe, Ethan era considerado poco valioso para la corona, al ser el hijo menor de un matrimonio infeliz.

Tampoco aportaba mucho al reino, no era un guerrero como su hermano Thomas o heredero al trono como Reith, solo era Ethan, el come libros como lo llamaban en la escuela y tampoco le molestaba el término, disfrutaba mucho leer y no se avergonzaba de ello.

Aunque en el fondo, muy en el fondo, deseaba ser otra persona, tal vez un príncipe con más relevancia y que no solo sirviera para eventos sociales o portadas de periódicos.

Dejó su libro a un lado y se levantó del pequeño sofá ubicado junto a su ventana favorita la cual tenía una hermosa vista al jardín de su abuela, la difunta reina Erina era la única miembro de la familia real que siempre había cuidado el pequeño e incomprendido príncipe. Ignorando sus melancólicos recuerdos, abandonó sus aposentos y se encaminó al salón azul o más bien a la sala del trono, no obstante su padre tenía un extraño gusto por nombrar las habitaciones por colores.

Conforme recorría aquellos sombríos pasillos podía notar con claridad la falta de calidez del palacio,no había fotos familiares a excepción de los retratos oficiales, y alguna que otra obra antigua, no recordaba la ultima cena familiar que no fuera por lucir bien o por convivir,nunca hubo familia, una vez frente a las grandes puertas del salón, se recompuso y espero el permiso para ingresar.

-Majestad -uno de los guardias anunció su llegada permitiendo el paso, y luego de cerrar las puertas de roble tras su espalda todo quedó en un silencio sepulcral- el príncipe está aquí

El rey se mantenía con una expresión seria ni siquiera miraba al príncipe el cual no hacía más que pararse frente a su padre esperando indicaciones o algún motivo por el cual su presencia fue solicitada.Tras unos largos minutos,finalmente su padre habló.

-Evan, como sabrás estamos en busca de realizar una alianza con el reino de kaigora y dicha alianza se sellara con un matrimonio.

Nuevamente se había equivocado en su nombre ya no era algo nuevo,a pesar de eso Ethan no podía concentrarse en la gravedad de la palabra matrimonio, su cabeza solo le repetía el hecho de que su padre ni siquiera sabía su nombre o no le interesaba pronunciarlo correctamente.

-Por ello tú has sido elegido para desposar a la princesa heredera Kamity de dicho reino.

El príncipe se enderezó rápidamente recobrando la compostura, tal parecía que no le estaban preguntando, más bien ordenando que se casara con aquella extraña persona. Elevo la mirada encontrándose con los severos ojos verdes de su padre, su tono de voz era calmado pero su mirada tenía un brillo extraño y peculiar.

-Comprendo, supongo que habrá una reunión previa a la boda - conforme Ethan hablaba, la sonrisa de su padre iba en aumento- asi conocere mi prometida.

-De hecho eso no es así, esta noche partirás a su palacio y de esta manera se sellará el compromiso

-Pero padre -aquella palabra causó un ceño fruncido en la cara del rey, entonces se corrigió de inmediato- su majestad, eso va en contra de las normas y costumbres,no quisiera causarle controversias a la familia real.

-No te preocupes por eso Estefan, te aseguro que ya todo está arreglado, puedes ir a preparar tus maletas.

Esa era su manera de echarlo sutilmente o más bien de decir que ya no lo necesitaba, sin mas que decir el joven de cabello rojizo abandonó el salón y se encaminó nuevamente a su habitación,trataba de no llamar la atención en los pasillos, y así evitar cruzarse con su hermano mayor, el cual había vuelto a palacio esa misma mañana. El príncipe heredero estaba increíblemente molesto con su hermanito, parecía encontrar gran satisfacción en verlo infeliz.