Secret | StYle

| What happend? |

Stan Marsh se encontraba muy atento mirando a su alrededor. Debía asegurarse de que su super mejor amigo no se apareciera cerca de él, no debía levantar sospechas de en dónde se encontraba. Todo eso mientras se comía una manzana.

Y cualquiera pensaría que al estar en la cafetería en vista de todos sería fácil de encontrar, pero no, él estaba sentado en una de las mesas más escondidas.

Estaba sentado con Pip, Damien, Gregory, Christophe, Estella y Pocket. Ellos eran los únicos que se sentaban muy alejados de todos los demás.

La idea no le gustaba del todo, pero no tenía otra opción. Craig lo mandó a la mierda cuando quiso sentarse en su mesa y las demás mesas estaban muy cerca de donde siempre se sentaba con Cartman, Kenny y justamente a quien no quería ver, Kyle. Y cualquier persona normal se iría al patio, pero ya se había ocultado en algunos lugares del patio y no sabía dónde más esconderse, y ya se había saltado la hora de comer varias veces, tenía hambre.

—¿Stan, estás bien? —le preguntó Pip al verlo preocupado.

—Eso no te incumbe, metiche —le respondió serio.

—No le hables así, idiota, te recuerdo que por él estás aquí sentado —le reclamó Damien.

—Perdón —se disculpó de mala manera, se tenía que acostumbrar a no tratar mal a Pip si quería mantener su estadía en esa mesa.

Esto es porque al principio, todos, excepto Pocket y Pip lo quisieron echar. A Pocket realmente no le importaba si él se iba o se quedaba, pero a Pip le dio pena, así que logró convencer a los demás para que lo dejaran quedarse.

Estaba tratando de controlarse, ya que estar en esa mesa le beneficiaba demasiado. Sabía que a Kyle al igual que algunos de sus amigos, le disgustaba mucho estar cerca de ese pequeño grupo, sobre todo por Pip. Era imposible que Kyle tan siquiera regresara a ver a aquella mesa.

Así que se quedaría ahí hasta el final del recreo e iría corriendo a clases. Kyle era muy responsable y educado, tanto que no se podía dar el lujo de interrumpir la clase arriesgándose a hablarle o a enviarle notas. Además, empezó a sentarse lejos de él. Cuando acabaran las clases, ignoraría el autobús e iría a pie a su casa. Él ya tenía todo fríamente calculado.

—Pero en serio, ¿qué te pasa? Pareces un desquiciado mirando a todos lados —ahora dijo Gregory.

—Larga historia, solo avísenme si Kyle se acerca.

—¿Tu amiguito peli-rojo de rizos que usa un gorro horrible? —preguntó Estella.

—Sí, ese.

—¿El que está viniendo para acá? —ahora habló Christophe.

—Sí… ¡¿Qué?! ¡¿Dónde?!

Pocket fue el que le apuntó hacia el frente. Kyle venía caminando y también miraba a todos lados. Cuando vio a Stan en la mesa, no dudó en acercarse corriendo y en pocos segundos llegó hasta ellos. Aborten la misión, el plan se arruinó otra vez.

—Stan, necesito hablar contigo… —No le dio tiempo a seguir, el de gorro azul se fue corriendo a toda velocidad hacia quién sabe dónde—. Mierda…

Kyle soltó un suspiro y simplemente volvió a su tarea de ir tras Stan. Si se daba prisa, podría alcanzarlo. Mientras que el grupo que todavía estaba sentado en la mesa se miró entre sí y volvió a comer como si nada, no era ninguna novedad que esos chicos actuaran raro.

Ahora Stan estaba corriendo por la escuela tratando de buscar algún lugar para esconderse, finalmente llegó a un aula vacía y se calmó un poco. Ya estaba cansado de correr tanto, lo había estado haciendo desde hace casi dos semanas.

Y es que no importaba dónde se escondiera, Kyle siempre lo encontraba y por ende tenía que correr. Había dos opciones lógicas para eso. Kyle lo conocía a la perfección y ya sabía dónde podía estar o Stan era terriblemente malo ocultándose.

Pero prefería correr antes de dejar en claro las cosas. Él esperaba que su amigo olvidara todo lo que pasó ese día, para su desgracia no lo hizo, trató de hablar con él sobre eso y ahí fue cuando comenzó a escapar, no de Kyle, sino de la explicación que claramente le debía a este mismo.

—¿Stan? —reconoció esa voz, regresó a ver hacia el frente y notó que Kenny estaba ahí.

—¿Kenny? ¿Qué haces aquí? 

—Yo solo estaba esperando a alguien. ¿Y tú? ¿Por qué parece como si el diablo te estuviera persiguiendo?

—Nada, solo… Cosas.

—¿Escapando de Kyle?

—No de él, solo ignóralo.

—Amigo, ya llevas casi dos semanas haciendo lo mismo. ¿Qué pasó entre ustedes? Antes se pegaban como chicle y ahora ni se quieren ver… O bueno, tú no a él.

Stan suspiró, dudó de si contarle todo, pero tal vez Kenny le ayudaría a encontrar una solución o al menos le aconsejaría algo útil. A pesar de todo, Kenny era más inteligente de lo que parecía y también un buen amigo.

Hora de contar todo.

828 palabras sin contar estas.

Otro fanfic de 3 partes de South Park.

Espero les haya gustado, ya saben que con una estrellita me ayudan mucho y si hay algún error me avisan.

Bye bye. 🐧