✨🌕 Bajo la luz de la luna 🌑✨

🪨Un pilar interesante🌕

Genya Shinazugawa era el aprendiz de Gyomei Himejima El pilar de la roca, el lo acepto como su sucesor y lo entrenó; Gyomei intentó enseñarle a genya la respiración de la roca, pero simplemente genya nunca supo cómo manejar las respiraciones ni las katanas, así que el utilizaba un arma muy peculiar, era una escopeta con balas especiales para asesinar demonios.

Mientras más pasaba el tiempo más cariño se tomaban entré ellos, el pilar se encariño con el joven y poco a poco comenzó a saber más sobre su vida, y le contó sobre la distancia que tenia con su hermano, Sanemi Shinazugawa el pilar del viento, gyomei lo conocía y le daba una profunda tristeza la situación de los hermanos, rezaba cada día por ellos y que las cosas mejorarán, que Sanemi no fuese tan duró con su hermano, que dejará de negarlo cómo su hermano, incluso algunas veces intento hablar con Shinazugawa, pero daba lo mismo, además no le gustaba meterse en problemas ajenos; lo que hacía era darle consejos a genya sobre cómo acercarse a su hermano y hablar para hacer las pases, aunque Sanemi siempre lo rechazaba, incluso intento agredirlo una vez, y gyomei no quería que genya se arriesgará de ésa manera, así que prefirió ya no hablarle de eso.

Todo iba excelente, genya cada vez se adaptaba mejor al entrenamiento tan pesado pero factible y necesario, gyomei estaba realmente orgulloso de su discípulo, sabía que cuando fuera la hora genya sería un excelente pilar, sólo que había un problema que no tenía que ver con el entrenamiento ni siquiera la cofradía de caza demonios; genya comenzaba a desarrollar con el tiempo cierto afecto amoroso hacia su maestro, cosa que no estaba bien en lo absoluto, gyomei no era conciente de ésto por el momento, ya que genya se encargaba de mantenerlo bien ocultó, aunque en algunos momentos era un poco obvio, y aún que fuese así gyomei se negaba rotundamente a creerlo siquiera por un instante, el lo quería como su padre, el quería ser la figura paterna que siempre le faltó a genya, y que lo viera de una manera que no era la correcta no era algo que le causará gustó; pensaba que genya confundía sus sentimientos con otras cosas, al ser un adolescente no podría saber con exactitud cómo que sentía, cosa que hería los sentimientos de genya, ser negado por la persona que más quería e incluso se atrevía  decir que amaba con total sinceridad, muchas veces intento dar a entender lo que sentía por medio de ciertas frases que se podían interpretar como un cortejó o incluso con detalles o acciones fuera de lugar. Está situación ponía en la espada y la pared a Himejima, ya que no quería herirlo de ninguna manera pero no podía aceptar sus sentimientos, y eso lo llenaba de tristeza y frustración.

En éstos momentos gyomei se encontraba sentado en una roca meditando, por el momento ni las lunas superiores ni Muzan habían dado señal de alerta desde que fueron eliminadas las lunas 4 y 5, cosa que era realmente sospechosa, seguramente tramaban algo ahora que la demonio nezuko desarrollo la capacidad de caminar bajo el sol; otra cosa que lo aturdía y llenaba de preocupación era la salud de su patrón, sabía que cada vez iba empeorando, cosa que lo llenaba de tristeza, ni un sólo día dejó de rezar por su patrón, después de todo le debía la vida; estás eran el tipo de cosas que rondaban en su mente día y noche, cada pensamiento y duda aturdían su integridad mental, haciendo que no logré concentrarse del todo bien en sus meditaciones, ni su vida cotidiana, cosa que lo estresaba de sobre manera.

Frunció el ceño al no poder concentrarse en su meditación, las lágrimas brotaban de sus ojos cómo de costumbre, frotó sus manos y suspiro desanimado, no sabía que más hacer para despejar su mente.

"— Quisiera poder concentrarme correctamente, pero hay tantas cosas que me causan tristeza e inconformidad, sólo me queda rezar para que las cosas mejoren, aunque....ya ni en rezar puedo concentrarme... que tristeza...—"

Pensó para el mismo gyomei mientras elevaba su rostro al cielo, escuchando el ruido de los árboles, el viento, los pájaros y la cálida sensación que el sol le daba en su rostro, a veces le gustaría ver un paisaje hermoso, con todos los vivos colores existentes, pero sabía que era imposible, quizás cuando muera buda y Dios le permitan ver de nuevo lo hermoso que era el mundo que el alguna una vez logró ver...

Mientras tanto en otro lado

— ¿Cumpliste con lo que te ordene? —

Pregunto el rey de los demonios mirando a la luna superior número 1 arrodillada ante el, espectante de una respuesta de su subordinado lo miraba con frialdad.

— Si, mi amo muzan, he cumplido con sus órdenes al pie de la letra —

Respondió con la cabeza gacha y con su característica voz ronca y fría, Muzan le había ordenado a él ciertas cosas importantes para ejecutar su plan, pero ahora que sabía que un Demonio era capaz de estár bajó el sol ya no necesitaba que las lunas superiores buscarán el lirio de la araña azul, y se los había hecho saber la reunión anterior, así que ahora necesitaba que cumplieran otra función, pero sabía que habían ciertos demonios que no servirían para lo que pedía, así que primero probaría su mejor luna para esté trabajo.

— Bien, ahora quiero que investigues al primer pilar que encuentres, buscá uno y síguelo sin ser visto, necesito información, de seguro abuyashiki ya les dió órdenes, y necesito saber cuáles son, consigue lo que pido y luego matalos —

Dió su orden. Nakime ya estaba investigando, pero más ayudantes serían realmente útiles, kokushibo escucho con atención las órdenes de su señor y le pareció algo peculiar, pero no iba a protestar o cuestionarlo.

— Si señor, así mismo lo haré —

— Retirate —

Kokushibo se retiró con rapidez dispuesto a cumplir las órdenes que le habían dado hacé unos segundos, necesitaba información de las áreas en las que se había visto a cazadores patrullando o algún avistamiento de un pilar, y sabía quién podría darle ésa información. Kokushibo se teletransporto frente a nakime y dijo sin rodeos.

— Necesito información de las áreas dónde se han visto pilares —

Nakime lo observo y le dijo:

— Le daré información, ¿Le parece bien si apenas caiga la noche lo teletransporte a las áreas que necesita? —

Kokushibo asintió.

— Si, gracias —

— Tome, en éste pergamino están las áreas dónde los pilares más frecuentan —

Nakime le extendió el pergamino y kokushibo lo tomó para después agradecerle.

— De acuerdo, gracias —

Dijo para después retirarse, la noche se asomaba y kokushibo ya tenía un plan concretó, aún que su plan también dependía del pilar que encontrará primero, ya sabía que áreas rondar está noche, enrolló el pergamino y lo guardó, pasaron unos minutos y la noche finalmente se hizo presente, sin previo aviso fue teletransportado a un bosque, inspeccionó el área y comenzó a buscar en los alrededores, siempre siendo cauteloso para no ser descubierto por nadie, hasta que paró en secó y se quedó callado y quieto, volteó ya que sentía una presencia cerca y ahí lo vió, un hombre arrodillado encima de una roca aparentemente rezando, con lágrimas en sus ojos, tenía el uniforme de los cazadores de demonios, parecía alguien demasiado fuerte, y rápidamente supo que era un pilar...quedó cautivado ante su fuerza y poder y algo más, esté pilar sería muy útil, y no sólo pará su señor, si no también para el.

"—Convertiré a éste pilar en Demonio...—"

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¡Hola!, les traigo está nueva historia, algo funable pero ni modo, lamento no actualizar mi otra historia, pero ya no sé cómo seguirla, y mejor se me ocurrió está (⁠•⁠ ⁠▽⁠ ⁠•⁠;⁠).