Tierra somos PARTE 1

Tierra somos

Mi nombre es Lucas, tengo 16 años, actualmente curso la preparatoria, o más bien sobrevivo a ella, no lo sé, no tengo muchos amigos, muchos de ellos son gente que no me recibe muy bien, a veces pienso que la gente no entiende lo complicado que es ser yo, quisiera que ellos también pudieran ver lo solitario que es no tener amigos.

Camino a la tienda, por mera inercia volteo a la izquierda de mi a ver la plaza que se encuentra fuera de mi casa, el verla solo me muestra que es el único lugar tranquilo que existe para mí, también puedo observar ese hermoso estadio de fútbol que, aunque este lejos, es lo suficientemente cercano para apreciarlo. Llego a la tienda, compro unas frituras y saludo a la señora Dalia. Salgo con la intención de ir al parque, pero veo a uno de los compañeros que me molestan en el salón de clases, y mejor me voy a casa, ahí es más tranquilo. Al lado de mi casa veo al señor Philips, está apilando unas maletas de manera muy curiosa y rápida, pero bueno, el señor Philips es ex - militar, tiene algo de sentido ver que siempre sea tan paranoico, incluso una vez casi golpea a mi papá solo porque toco la puerta de su casa. Al entrar a mi casa veo a mis hermanos, mi hermana Rosy y Mi hermano Leo, ambos son mayores que yo, por lo tanto, según mis padres, son más responsables.

Cuando me dirijo a mi cuarto, las luces empiezan a parpadear y la señal de la tele se va, mi papá me avienta la mochila en la cara y me carga como si de un trapo se tratara, le grita a mis hermanos y a mi mamá que corran al auto, cuando me suelta para que suba, me quedo paralizado y veo como un pequeño destello cae suavemente en el estadio, al tocarlo el silencio invade todo y después un pitido muy denso entra en mis oídos, es una explosión, tan magnifica y aterradora como las imaginaba, mi hermano me estira al carro y cierran la puerta lo más rápido posible, todo pasa en segundos y no entiendo nada, la palanca de cambios sufre al adaptarse al nivel de velocidad que mi papá alcanzaba. Como supondrán vivo en una zona céntrica con varios edificios, todos ellos se veían más grandes de lo normal, muchos caían a pedazos, la gente gritaba, sospechosamente no había tanto pánico como espere, es como si todos se acabasen de enterar, lo cual mientras me invade el miedo, también la duda, ¿Cómo es que mi papá y el señor Philips sabían que algo pasaría?

El auto avanza y sin detenerse, todo pasa como en cámara lenta, todos los pensamientos como persona que había tenido, desaparecían en ese caos, es bello y misterioso como tanto desastre te puede limpiar la existencia, pienso cosas muy estúpidas y existencialistas mientras todo esto pasa, casi soy un filósofo.

Mientras razonaba mi existencia, parece que cada vez nos alcanza más la nube de la explosión, un edificio cae enfrente de nosotros, no sé qué está pasando, el humo de la explosión nos alcanzó, todo se nubla, suena un estruendo, no oigo nada más, creo que morí...

Es raro, mi cuerpo se siente muy ligero, suena metal, pasos acercándose a mí, cadenas y balas, una advertencia ¿Será el infierno?

Ahora siento un dolor en mi cabeza, algo me aplasta y me lleva, suena una voz, algo melodioso

- Estoy aquí contigo, ahora todo estará bien.

Creo que alguien me rescato del infierno y ahora me llevan al cielo, todo se suaviza, una luz aparece y luego se desvanece despacio, creo que ya no voy al cielo, es raro, ¿Cómo se llamaba este lugar donde iba la gente que no subía ni bajaba?, bueno, ya no importa, fue una vida rara, no me arrepiento de nada, adiós mundo cruel...

*TODO SE OSCURECE*