𝗖𝗨𝗣𝗜𝗗 | one piece x oc female!
Fukua Umiko, una romántica sin remedio que se enamora de la primera persona que pasa frente a ella, se verá relacionada con la extraña tripulación del futuro rey de los piratas.
¿Mala suerte?
¡No!
Umiko lo llama...
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Umiko's pov
Caminaba jadeante, intentando llegar a la entrada, miraba a mi alrededor con algo de temor, dios, Klahadore me había apuñalado con una cuchilla larga, mi pie dolía tanto y no tenía como detener el sangrado, algo avergonzada por mi siguiente acción observé hacia ambos lados, suspirando.
Quedando solo en brasier, me quité la camiseta, rompiéndola con la pequeña daga que portaba en mi muslo. ⎯Dios.⎯ hice un puchero, era una de mis favoritas, pero moriría desangrada, bueno, no moriría, pero es peligroso.
Me amarro la tela en el muslo, haciendo presión para detener el sangrado, entonces sentí unos pasos cerca de mí, por lo que me apegué a la pared, mirando hacia ambos lados, pero la pared se corrió, haciendo que soltara un pequeño grito mientras me deslizaba por la tierra y el cemento que aquel pasadizo oscuro y secreto, hasta que finalmente llegué a una zona pastosa.
¿Acaso había logrado salir de la mansión?
Comencé a correr (o al menos hice el intento) dirigiéndome a la parte principal de la casa, sentía una punzada en la pierna izquierda, intento presionar mientras sigo a paso veloz, entonce veo como unos marinos en la puerta, sostenían a Luffy.
⎯Capitán.⎯ grité caminando hacia el con preocupación, estaba dormitando, pero antes de poder tocarle un marino colocó su espada en mi cuello.
⎯Quieta.⎯ murmuró.
Alcé una ceja, lo conocía. ⎯Oh, eres el nudista.⎯ sonreí, para volver a colocarme seria. ⎯Déjame avanzar o te arrepentirás.⎯ amenazo hacia él.
⎯No trabajo para piratas.⎯ escupe. ⎯Además...⎯ pasea su vista por mi torso. ⎯No soy yo quien anda semidesnudo.⎯ me sonrojo con violencia.
⎯¡Pervertido!
Estaba totalmente dispuesta a golpearlo, cuando una voz se hizo presente. ⎯¿Umiko?⎯
Volteé, topándome con los inconfundibles y bellos ojos de Koby. ⎯Koby.⎯ sonreí aliviada, al menos no eran solo idiotas, quería lanzarme sobre él y abrazarlo, pero sé que no era el mejor momento, ya que podrían tomarlo como traición o lo que sea que hagan los marinos.
⎯Debo hacerlo... lo siento.⎯ me murmura, sé a lo que se refiere, así que solo muevo la cabeza para que entienda que estoy de acuerdo, un marino toma mis brazos con brusquedad y me coloca unas esposas.
