Capitulo 2: Las Dudas llevan al Pánico, y el Pánico causa Dudas

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¿Dónde estoy?, ¿cómo llegue aquí?, ¿qué es este lugar?, ¿estoy soñando?, ¿me desmaye?, ¿fui secuestrado?, esas eran algunas de las muchas preguntas que Tobías se hacia, por el susto y la impresión, decidido volver a entrar en la habitación del consultorio, pero al darse la vuelta, la puerta había desaparecido, ya no se encontraba rastro de su procedencia, Tobías se empezó a hiperventilar un poco, estaba asustado, confundido, alterado, así que empezó a caminar hacia la orilla del lugar para sentarse y tranquilizarse, el mismo recordó que las dudas llevan al pánico, así que decidido tranquilizarse, tomo aire y comenzó a relajar su respiración, se levanto y empezó a caminar por el lugar para investigar un poco, literalmente, se encontraba en un hoyo, un sumidero bastante grande y profundo de forma circular, las paredes eran de concreto y completamente lisas, la altura o profundidad era como de un edificio de 20 pisos, aun así, el lugar parecía muy viejo y abandonado, muchas paredes tenían grandes grietas y muchas plantas enredaderas en las paredes, aun que no eran muy largas para escalarlas y poder salir, el piso del lugar era de tierra y pasto, con muy poca vegetación, y justo en medio, había un columpio de metal, parecía un columpio común y corriente, como los que se encuentran en los parques para niños pequeños, lo único que destacaba del columpio era que estaba intacto, nuevo, reluciente, como si hubiera sido fabricado el día de ayer, después de eso, no había nada mas en el lugar, no tenia techo, así que dejaba ver el inalcanzable cielo azul, las paredes no tenían ninguna forma de escalarse, no parecía haber cambiado la hora del día, era temprano, así que eso lo confunde mucho, o es el día siguiente, o de un segundo a otro llego ahí, pensó que tal vez era un efecto secundario de alguna medicina, así que opto por pellizcarse el brazo, pero efectivamente, le dolió y nada cambio, esto era completamente real, su preocupación aumento un poco mas así que empezó a gritar hacia la superficie para intentar llamar la atención de alguien.

-¡¡¡AYUDENME, ALGUIEN ME OYE, NECESITO AYUDA!!!-

En la superficie no se lograba ver nada ni escuchar nada, no tenia idea de en que parte de Noruega podría estar situado, o si al menos seguía en Noruega, empezó a recorrer el borde del lugar para hallar algo, una pared hueca, puerta oculta, o cualquier pista de donde estaba, después de investigar por un buen rato, no encontró nada, las dudas no lo dejaban pensar con claridad, así que se recostó en la sobra causada por el borde del hoyo y se puso a pensar:

-(Si mi papá ve que desaparecí, ya me estará buscando por toda Noruega, también le pedirá ayuda a la policía, lo malo es que preocupara mucho a mi madre y al abuelo, esto es malo, ¿como rayos llegue aquí con solo cruzar una puerta que ya no esta?)-

Se quedo recostado un momento mas, volteo y se quedo mirando el columpio, algo raro tenia que le llamaba la atención, así que se levanto y camino hacia el, llego al columpio y se sentó, era un columpio de base de plástico, cadenas de acero al igual que la base, el columpio estaba pegado al piso, no se podía mover, y para pensar en otra cosa, decidió empezar a columpiarse, era un sentimiento nostálgico de cuando jugaba en los parques de niño, cuando en eso, empezó a anochecer, ahí se revelo una respuesta, sin duda, Tobías sabia que llego ahí tiempo después de su revisión medica, ya que era de mañana en ese entonces y ahora estaba anocheciendo, de inmediato busco un lugar donde se podía recostar, a pesar de que todo el suelo era pasto, no habían insectos ni estaba sucio, básicamente se podía recostar donde sea sin ninguna preocupación, por el color del cielo y la posición de las nubes llego a la conclusión de que eran por ahí de las 7 o 8 de la noche, pero lo que mas le preocupaba es que será la primera vez que se iba a la cama sin antes haberse tomado sus pastillas para su enfermedad, exactamente no sabia que pasaría si se dormía sin haberlas tomado pero lo que si sabia era que no duraría mucho sin ellas y que tenia que salir de ahí a como de lugar, así que se recostó cerca del columpio y cerro los ojos esperando que al despertar se encuentre en su casa, o esperaba que alguien lo encuentre o despierte si es que estaba en un sueño, no sabia si había sido drogado o envenenado, así que solo decidió cerrar los ojos y esperar los mejor.

A la mañana siguiente, se despertó en su cuarto, en su habitación, en su casa, no lo podía creer, estaba tan feliz, tan emocionado que se le salieron unas cuantas lagrimas de la felicidad, de inmediato fue al cuarto de sus padres pero al entrar no se encontraban ahí, fue a la habitación de su bisabuelo y tampoco se encontraba, luego vio la hora y recordó que todos se levantan temprano y ya deberían estar en la cocina, si que bajo las escaleras gritando:

-¡Familia, buenos días!-

Bajo a la cocina pero ahí tampoco estaban sus padres ni su bisabuelo, se preocupo un poco y empezó a gritar:

-¡¡Hola, ¿Hay Alguien?!!-

Nadie le respondía, tomo el teléfono de su casa y marco a sus padres pero ninguno contesto, salió de su casa aun en pijama para revisar el exterior, no se veía a ninguna persona a los alrededores, se dirigió corriendo a la casa de sus vecinos, no ocupo tocar la puerta pues ya estaba abierta, entro y empezó a buscar a cualquiera persona que podría ayudarlo, pero ni en esa casa había una sola persona, tomo el celular y llamo a la policía pero igual no respondían, se empezó a preocupar y a asustar, salió a la calle y grito:

-¡¡¡HOLA, ¿HALGUIEN ME OYE?, NECESITO AYUDA!!!-

No había nadie en el vecindario, se preocupo mas y por el susto se encerró en su casa, en eso se escucho un ruido proviniendo de la habitación, decidió subir lentamente, cuando abrió la puerta, vio a su madre, la cual estaba botando sus pertenencias a la basura, de inmediato entro y le pregunto:

-Mama, ¿Qué haces?-

A lo que la madre le respondió:

-Estoy tirando todas estas cosas que ya no sirven-

Tobías le pregunto:

-¿Cómo que no sirven?, yo las uso-

La madre le respondió:

-Por eso, ya no tiene sentido tener estas cosas si muy pronto te vas a morir-

Tobías se asusto demasiado, estaba en shock, retrocedió y se coloco contra la puerta, su madre le dijo:

-Ves, ya no tiene chiste tener estas cosas ya que pronto no las vas a volver a usar nunca, así que matamos dos pájaros de un tiro y tiramos unas cosas y vendemos otras, y todos felices-

Tobías estaba al borde de las lagrimas, pero decidió preguntar:

-¿Por qué..., dices eso?-

A lo que la madre respondió:

-Por que mi querido hijo, se va a morir, muy, muy pronto, es mas, creo que seria mejor empezar a olvidarlo-

Tobías empezó a llorar poco a poco, dijo:

-No, mamá...-

En eso se escucho a su padre entrar a la casa, de inmediato bajo y le hablo:

-Papá ayúdame-

Pero el padre lo ignoro, ni su bisabuelo lo volteaba a ver, y en frente de sus ojos, presencio como su bisabuelo y su padre, remplazaban las fotos familiares a otras donde no se encontraba el-

Tobías empezó a sentir una presión en el pecho y de la presión y la impotencia, dio un grito causando que se despierte.

Así es, Tobías se percato que eso había sido un sueño, aun estaba en el sumidero/hoyo, ya estaba amaneciendo poco a poco, Tobías se sentó y se limpio las lagrimas de la cara, se levanto completamente deprimido y triste, estaba muy desanimado por el sueño que acababa de tener, así que decidió sentarse en el columpio y empezar a columpiarse, durante 1 minuto se estuvo columpiando, cuando de repente sintió un fuerte dolor en el pecho causándole tos, pero cuando se dio cuenta, por la tos, había escupido sangre, estaba paralizado, confundido, asustado, presionado, en shock, con mente en blanco, no podía moverse del columpio, empezó a llorar y a gritar del enojo, no podía creer que su enfermedad haya a empezado a crecer mas, y le asustaba la idea que no había forma de salir, ni de retrasar la enfermedad, ni nada, la pared no se podía trepar, las enredaderas de la pared no llegaban hasta arriba, de hecho, se quedo mirando las enredaderas y se percato que se habían extendido un poco, pero en eso, empezó a sonar que se aproximaba una tormenta, una gran tormenta eléctrica se acercaba, Tobías pensó:

-¿Y ahora que hago?-

The SWING / The Backrooms SeriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora