Accidente - Diluckae/Kaeluc

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Aclaración: En esta historia no se consideran hermanos, son más como amigos o compañeros.

AVISO: Tendrá Lemon entre hombres, y para el que no sepa qué es Lemon, pues básicamente son historias donde habrán relaciones sexuales

A los q les gusta este tipo de lectura, disfruten
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La brisa del viento soplaba la cara de la gente que disfrutaba del hermoso día soleado de Monstadt, junto a los pájaros que cantaban y el ruido de la gente que hablaba en diferentes lugares.

Todo era paz en la ciudad, pero había alguien que disfrutaba esa paz mucho más que los demás, ese era Kaeya, el Capitán de caballería de los Caballeros de Favonius, pues este le gustaba no hacer nada y disfrutar por ahí.

Sobretodo le gustaba escaparse para ir a la taberna con su amiga, Rosaria. Ambos se la pasaban tomando ahí y hablando de cualquier cosa o haciendo chistes (malísimos), a veces en compañía de un bardo llamado Venti.

Cuando estos tres se juntaban, Diluc, el dueño de la taberna, tenía que mantenerlos vigilados ya que a veces se les ocurría hacer cualquier estupidez que haga que los clientes se vayan debido a la incomodidad.

Este ya estaba harto del trío de borrachos, hasta pensó en echarlos una vez y prohibirles la entrada permanentemente, pero Kaeya siempre le estaba rogando que no lo haga o sino lo molestaría hasta su muerte.

-Oye Kaeya qué es esa botellita que llevas ahí?- Preguntó la de pelo color vino (que coincidencia), apuntando a una botellita con un líquido rosa transparente que estaba guardada en un bolsillo del peliazul)

-Oh, esto? no es nada, solo algo que Albedo me dió para que se lo entregue a una mujer, según para arreglar su matrimonio o algo así- Respondió el de cabello azúl mientras mostraba la pequeña botellita de cristal-

-Y por qué te la dió a tí si es para una mujer?- Preguntó curioso el bardo de trenzas-

-Me pidió que lo entregara yo por él, porque está muy ocupado en otras cosas y no puede ir él en persona-

-Ay Kaeya y qué haces aquí? ve a entregarlo antes que Albedo se entere que estás aquí-

-Tranquila Rosaria, solo unas copas más y me voy-

-Eso!- gritó el bardo -Oiga Señor Diluc, me sirve más?-

-Creo que ya has bebido demasiado hoy, mejor vuelve por donde viniste- Respondió el pelirrojo ya molesto de tanto aguantarlos-

-Vamos Sr.Diluc, no sea aburrido, además solo tomé 3 copas-

-Solo 3 copas? Porque yo veo 7 ahí- Dijo apuntando debajo de la silla de Venti-

-Ese no fui yo! Fue Rosaria, ella es la más borracha de los 3, y eso que trabaja en la Catedral-

Cuando Venti volteó a ver a Rosaria, esta lo miraba con una cara asesina mientras sostenía una lanza en su mano, y al ver esto comenzó sudar de los nervios.

-E-Era broma Rosaria..- Dijo Venti riendo nervioso

-¡Esa excusa no te salvará de quedarte sin un ojo y de que te arranque esas trencitas tuyas!-

Acto seguido, Rosaria se abalanzó contra Venti con la intención de clavarle la lanza en un ojo.

Esta escena aterrorizó a las demás personas que estaban en la taberna viendo todo, algunos empezaron a murmurar o se iban de allí.