SANTHIAGO
Este es sin duda el partido más importante de mi carrera futbolística, las gradas están llenas y la presión se apodera de mí, el marcador es 1-0 favor del equipo contrario, debo meter mínimo un gol para que pueda pasar a la siguiente prueba, sin presión. Comienzo a correr, el balón llega a mi estoy apunto de tirar y el maldito gordo del equipo contrario decidido comenzar a jugar sucio, me tomo de la playera y luego caí al suelo, me levanté y continúe jugando, corrí tras el balón y luego me pusieron el pie, caí sobre mi brazo izquierdo. MIERDA, esta vez duele mucho... demasiado no me puedo levantar, la camilla llega corriendo y me suben, salimos del campo y unos tacones corren de tras de mí, Riley y sus zapatos inapropiados van de tras, en la enfermería me dijeron que debían llevarme al hospital porque esa lesión no podía ser atendida aquí.
Mattheo manejo hasta el hospital y Riley me daba chocolate cada que se lo indicaba, Chris estaba de viaje familiar, ahora que su mamá regreso no quiere perder el tiempo.
—Abajo, chicos. Riley, acompaña a Santhi, iré por los formularios —Mattheo me abrió la puerta—. Los espero ahí —salió corriendo.
Riley me acompaño a la sala de espera de emergencias y luego regreso Mattheo para llenar los datos, El dolor es insoportable, mil veces prefiero morir que sentir esto. El doctor dijo que tenia una fractura en el radio y me enyesaran, debo esperar 30 min aproximadamente porque hay muchas personas debido a un accidente en la autopista, Riley hablo con el doctor por un buen tiempo y luego regreso con nosotros.
—Santhiago toma tus cosas vamos a mi casa —comenzó a recoger mis cosas—, un mejor doctor te atenderá ahí.
Me llevaron a la mansión Brown y como me lo dijo antes un doctor estaba esperando ahí, su casa es tan grande que tiene un consultorio equipado, entrando ahí el dolor ya está por acabar de matarme, me siento tan débil que ya no puedo caminar, Mattheo me ayudo a entrar y se quedaron conmigo cuando el doctor me hizo sentir aun mas dolor. Termine con un yeso que Riley suplico por ser la primera en firmar, accedí solo por sus atenciones, no porque me agrade. Luego Mattheo firmo con una frase "Debemos caer para levantarnos y llorar para reír. M.R."
Todo iba genial hasta que llego la hora de ir a mi casa, si llego así mi madre me matara y tendré que dejar el Futbol. —Riley, no puedo irme a casa ¿Puedo quedarme contigo? —ruego para que me deje quedarme con ella—. Mi madre nos matara por esto.
—Santhiago, me quedare en casa de Marie, puedes quedarte con nosotros —gracias a Dios—. Mattheo conducirá porque yo lo tengo prohibido.
—Vamos Santhi, te llevare a casa, pero deberás hablar con tus padres en el camino —Mattheo condujo hasta otra casona, esta con un jardín más grande y un estilo más europeo. Ahí nos recibió una chica de limpieza que nos condujo hasta la que sería la habitación en la que me quedare.
—Si necesitas algo puedes decirme, sin problemas —Mattheo ofreció—, hare una llamada y regreso.
—Santhiago, te confiare algo porque hasta ahora eres mi amigo más cercano después de Christian: en realidad soy hombre —Que carajos, estoy seguro de que mi expresión es de asombro totalmente, ni siquiera es discreta—. Es mentira —comienza a reírse—, Solo quería hacerte reír, tu dolor debe ser insoportable y como no puedo aliviarte mi única opción es hacerte reír. Debiste ver tu cara fue sin duda genial —Buena táctica porque en realidad si me hizo reír.
—Vamos Riry, por un segundo muy pequeño si creí que eras hombre, antes de que te empezaras a reír, claro. Te agradezco genuinamente todo lo que estas haciendo por mí.
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Más de lo que merezco
RandomQue pasa cuando lo que creemos tener asegurado se va, cuando regresamos al mismo punto donde empezamos, perdidos de nuevo en busca de respuestas o un ángel que pueda salvarnos. Nos sumergimos en un mar lleno de desgracias, esperando que un salvavid...