¿Crees que puedes librarte tan fácilmente de él?
Todos en la universidad conocen a Kim Seokjin, el capitán de fútbol americano. Su novio es Kim Taehyung y ellos son la pareja más famosa de allí.
Todos saben que Seokjin es posesivo con Taehyung, él e...
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Flashback: El Que No Debería Estar
Seokjin tenía trece años la primera vez que su padre fue más allá.
Su familia era establemente económica, y Jin quiso tomar clases de piano a los doce. Dongseok, a regañadientes, aceptó y pagó sus clases. Muy equivocado estaba Jin, al pensar que ese instrumento sería una escapada fuera de su cruel y cierta realidad.
Lejos de ser su salvación, fue lo que trajo más pesadillas.
"¡Mal, mal, mal!" Gritó Dongseok, los dedos de Harry quedaron quietos y helados, bajando la cabeza instintivamente. Su cuerpo temblaba asustado por los gritos de furia de su padre "¿Por qué te pago las putas clases si no aprendes nada, eh? ¡Contéstame!"
"Dongseok, tan solo se ha equivocado en una nota, por favor.." Eunkyung murmuró en voz baja, temerosa. Los ojos de Jin quisieron llenarse de lágrimas, pero su padre siempre dijo que llorar solo le traería más problemas.
Y Jin no quería ser golpeado de nuevo.
"El problema es que no valora las clases" Escupió Dongseok, sujetando una botella medio vacía de cerveza "Pero yo le voy a enseñar a apreciarlas"
El sonido ensordecedor del vidrio siendo estrellado contra el suelo es algo que a Jin jamás se le olvidará. Su ingenua mente no tenía ni idea del castigo que le iba a imponer su padre, tan sólo por haber fallado una jodida nota.
Los cristales marrones estaban esparcidos en un área, el alcohol derramado junto con espuma. Desmond lo miró con ira, "Quítate los zapatos"
"¿Qué?"
"Quítate los zapatos y calcetines, camina sobre los vidrios" Le ordenó, Jin abrió los ojos con asombro y horror "¿Quieres un puñetazo o qué? ¡Los putos zapatos, Seokjin!"
"P-Pero papá.."
Dongseok se sentó en el sofá del fondo, acomodándose para estar pendiente de que Jin caminaba. Jin miró a Eun en busca de ayuda, pero la mujer tan solo bajó la mirada "M-Mamá..." Titubeó temeroso, aguantando las ganas de llorar. Su padre parecía esperar, casi ansioso por ver el espectáculo de su hijo caminando dolorosamente por encima de objetos punzantes.
"Hazle caso a tu padre, Jin"
Él recuerda la sensación de los vidrios rasgando la planta de sus pies, la sensación de los cristales incrustándose en su piel fue una sensación que tuvo que repetir, en total exactitud, diecisiete veces. Sus pies tenían cortes y dolían, su piel quemaba y ardía sin la necesidad de siquiera tocar algo.
Era una situación tan punzante y dolorosa, que Seokjin tuvo la necesidad de vomitar todo aquello que apenas había comido por la mañana, porque su padre lo había castigado sin comer por no ordenar sus libros. El enfermo sentimiento de trozos puntiagudos e infestados de putrefacto alcohol era horrible, y Jin tenía terminantemente prohibido llorar o decir una sola palabra.
