El tallar de tus ojos

Parte única

Por más que me talle los ojos tú no estas ahí, dime solo era yo con mi imaginación o la cordura que me mataba con solo verte ahí. Si, con verte en aquella plaza a esa hora de las cinco de la tarde y con tu botella de canicas presumiendolas como siempre diciéndome que los ganabas con cada partida con tus compañeros de clase y yo como siempre ansioso de jugar con las canicas. Era algo habitual de nosotros juntarnos en esa plaza, vos, saliendo del colegio y yo de mi casa para juntarnos en esa plaza, las horas nos pasaba hasta hacerse de noche era mis momentos favoritos de cada día. Pero ese día no sentía al mismo chico con los que jugaba todo los días. Te veías mal, como cansado y apagado, dijiste que "el" volvió y también su rutina, con vos y tu mamá, yo solo trage saliva sabía de él claro que sabía de el cada pensamientos y imaginaciones de él solo me daban esaclofríos. Llego la hora de despedirnos ya se había oscurecido, tu solo guardaba tus canicas sin animos, como si no quisieras ir en tu casa sabiendo que estaba el. nos depedimos cada uno por su camino. Yo solo llegue en casa con un bajon, mamá solo al ver mi cara pregunto que es lo que pasaba y yo solo dije: "El volvió" mamá solo suspiro como de frustración porque sabíamos de el. Mamá solo cambio su cara para poder cambiar el mío diciendome "la cena va a estar en un rato, anda a bañarte y luego bajas a comer" yo solo asentí con la cabeza, la cena fue silenciosa con solo nombrarle a el era obvio que nos ponían tensos. Termine de comer me fui a solo cepillar y solo a dormír. Ese día pense en cambiarte el animo para que estaras a gustos conmigo y olvidarte un rato de "él". Fuí a comprarte un helado de chocolate como te gustaba y te espere en esa plaza, no llegabas, pense que era un solo retraso tuyo. te espere en esa plaza hasta que se oscurecio y y el helado derretido te esperabamos solo volví a casa seguro no tenías animos de jugar, seguro mañana estarías ahí. No no estabas ahí tampoco, ni el siguiente, ni en la otra. El quinto día mamá me miro con sus ojos llorosos yo la mire, ella abrio sus brazos yo camine despacio hacia ella apoye mi cabeza en su pecho, yo tambien empece a llorar porque no podía ser cierto que eras tu en las noticias ver tu foto en la tele no podia ser cierto, no podías estar muerto, no podías estarlo, "el" te había ahorcado con sus manos, "el" lo había hecho.

Aún sigo llendo en esa plaza para poder verte con tu frasco de canicas, por más que me duela no puedo aceptarlo, no puedo dejarte ír, por eso cada cinco de la tarde estoy ahí con mis canicas en esa plaza en las que siempre nos reuníamos.