Mi pequeña florecilla otoñal
Tú que brillas como nadie.
Extraño verte,
Extraño hablarte,
Extraño tenerte entre mis brazos.
Mi pequeña, enorme, alegría.
Tú que me llenas de vida y colores.
Añoro tu locura,
Tus rebotes,
Tus caricias.
Mi flor adorada...
Tú que me hipnotizas con tu aroma singular.
Anhelo volverte a tener en mi vida, en mis días y mis noches.
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AQUI ADENTRO HAY PAZ
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