ES OBSESIÓN... NO AMOR...

★ CAP 9 ★

Jimin bajó al primer piso de la casa de su padre y se sentó en el comedor para esperarlo... Las empleadas terminaron de poner la mesa e hicieron una reverencia para irse.

-Buen día padre–Saludó Jimin al verlo entrar, se levantó e hizo una reverencia.

-No tiene nada de bueno–El señor Park se sentó y suspiró pesado. -¿Cómo sigues de tu quemadura?.

-Mejor, las cremas que envió mí suegra sirvieron mucho.

El señor Park bebió un sorbo de su café.

-Ya no quiero que te cases con Jeon Jungkook, ese es un chiquillo inmaduro, irresponsable, malcriado y grosero, es un patán engreído y...

-Muy guapo–Jimin empezó a desayunar. -Sabes que no puedo enamorarme, querer o amar a alguien...

-Por eso digo que...

-Necesito a Jungkook–Jimin miró a su padre. -Esta noche lo llevaré a mí casa e intentaré que se acueste conmigo.

-Hijo...

-Solo será un intento–Jimin volvió a poner la vista en su plato y siguió comiendo. -No lo voy a violar.

El señor Park solo suspiró pesado, no sabía si asustarse o preocuparse por la vida de Jungkook.

-Come padre, pronto no podré venir a desayunar tan seguido contigo.

-Haz lo que quieras, no volveré a decirte nada... Ve con Namjoon está semana, solo así podré estar más tranquilo.

-Ire en la tarde antes de ir por Jungkook.

El señor Park asintió y con desaliento empezó a comer, Jimin lo miró y al verlo tan apagado sintió la obligación de tomarle la mano.

-¿Quieres que sonría para ti?.

-Solo un poco, eso mejoraría mí día.

Jimin como había aprendido al pasar de los años elevó solo un poco sus comisuras siendo aún más hermoso para su padre que sonrió olvidando todo lo malo que podía hacer su amado hijo.

••••

Jimin subió al piso 12 del edificio Hangul, cuando se abrieron las puertas del elevador salió con su jefe de seguridad.

-Que preparen todo para esta noche, Jisung nada puede salir mal–Jimin lo miró y él bajó el rostro.

-Asi lo haré señor, no salga de este piso sin los guardias, me retiraré...

Jimin se acercó a recepción y habló con la recepcionista que lo conocía hace muchos años, le pidió esperar unos minutos ya que pronto sería su turno.

Jimin sacó su celular y revisó algunos correos electrónicos que le habían llegado, se los mandó a Seokjin y esperó con los ojos cerrados.

Al rato fue llamado.

-Señor Jimin es su turno, el doctor Kim lo espera–Le dijo una joven practicante.

Jimin se levantó y fue al consultorio, abrió la puerta viendo a su psiquiatra sentado con una libreta en la mano.

-Gracias por venir–El psiquiatra lo miró y sonrió. -Me tenías abandonado.

-Solo fueron tres semanas sin venir–Jimin cerró la puerta y se quitó el saco dejándolo en el sofá.

-Debes venir una ves a la semana–El psiquiatra se quitó los lentes. -¿No habíamos llegado a un acuerdo?.

-Estaba buscando un marido–Jimin se paró frente a la ventana juntando sus manos en su espalda.