Capítulo 1

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Terminar una relación nunca era fácil, aunque fuera en buenos términos seguía siendo algo que dolería. Al fin y al cabo significaba terminar una conexión y confianza con alguien a la cual juraste amar por siempre.

Pero si seguían siendo amigos, no habría nada de malo aceptar a tu ex en tu departamento por unos días ¿Cierto?

–Choi YeonJun no digas estupideces –Volteó los ojos su amiga– Al único al que quieres engañar es a ti mismo ¿Vivir con Soobin? ¿A quien se le ocurrió esa idea tan idiota?

Yeonjun resopló sintiéndose poco comprendido, sabía que era una mala idea pero algo dentro de él le decía que no podría salir tan mal. Ambos se conocían desde hace años y se tenían la suficiente confianza y madurez, aquello debería de ser suficiente ¿No?

–A ninguno –tomó de su limonada y continuó– Soobin me llamó ayer y me contó que no podia seguir viviendo con su roomie, que no tenia a donde ir en lo que encontraba otro departamento. Sería solo temporal hasta encuentre un lugar nuevo donde vivir, no creo que sea mucho tiempo.

–Si pero terminaron hace un mes Yeonjun, me ha tardado más en venir el período a que ustedes volviendo a estar juntos.

–¡No estamos juntos! –aclaró abruptamente–No vamos a volver, jamás volvería con él.

–No, solo van tener relaciones indefinidamente –rodó los ojos juzgando las acciones de su mejor amigo, no entendía porque él no podia ver lo erróneo que era llevar acabo aquella descabellada idea– Ya no eres un niño, Yeonjun, tú sabrás lo que haces. Solo te digo que me parece una muy mala idea.

Yunjin finalizó su punto volviendo a prestar atención a sus cuadernos sobre la mesa, el almuerzo estaría por terminar y no tenía mucho que prestar en los problemas en los que su amigo se metía por decisión propia.

Por su parte, Yeonjun quedó meditando la situación y la postura de la chica. Sabía que iba a reaccionar de esa manera pero también esperaba que pudiera aconsejarlo, no le quedaba más que seguir a su propia intuición.

Y su intuición le decía que nada malo podía pasar.

¿Cierto?



🗝️🚪



–¡Yeonjun! ¡Por aquí! –llamaron por lo lejos su nombre.

Era Soobin.

Su dulce, guapo y alto exnovio. Quien portaba aquella negra cabellera que tanto lo volvía loco, junto con esas gafas que perfilaban su rostro de maneras inexplicables.
Su conjunto de pantalones holgados y camisa overside blanca no ayudaban mucho a contener las ganas que Yeonjun tenia de lanzarse a sus pies.

Pero él ya lo había superado ¿Saben?

–Hola Soobin –levantó su mano en tono de saludo un poco cohibido, por fin era el día donde aquel apuesto hombre llegaba a su departamento– ¿Necesitas ayuda?

Se acercó a ayudarle cuando Soobin solo atinó a sonreír un poco nervioso pues era obvio que necesitaba un poco de ayuda, sus maletas no podían ser sostenidas por él solo y eso sin contar que cargaba una planta que luchaba por si misma en no caer al suelo.

–Te lo suplico –rogó con simpatía mostrando aquella dentadura perfecta.

Yeonjun era un cúmulo de pensamientos intrusivos que le decían, no, que le rogaban por tomar aquellos familiares labios entre los suyos y dejar cualquier tonta diferencia y volver a su lado.

Era obvio que no pensaba con claridad y él mismo se repetía que necesitaba calmarse, que aquellos pensamientos eran creados gracias a que llevaban bastante tiempo sin verse.

Una vez ambos dentro del departamento y la planta de Soobin junto con sus demás cosas a salvo, el silencio reinó hasta el último centímetro de aquel complejo.

–Escucha...te agradezco mucho por recibirme...–el peli negro comenzó a acercarse peligrosamente para la última neurona de cordura que quedaba en Yeonjun.

–La habitación de la derecha será la tuya –interrumpió cualquier que haya sido el plan del más alto– No tengo una cama extra pero hay un futón muy cómodo, si necesitas otro edredón puedes decirme sin problemas.

Y así fue como volvieron a estar en silencio, incómodos y tensos.
Yeonjun miraba perdido su propia alfombra, sus tenis, el techo y más bien, cualquier cosa que no sea al chico que tenía al frente.

–Y...¿Como has estado? –Soobin lo sacó de su trance a lo que le provocó un suspiro al castaño– Veo que pintaste tu cabello, se ve bien ¿Es como un rosa deslavado? ¿Cómo rosa...?

–¿Que estas haciendo? –le interrumpió– Te acepté en mi casa porque no quería que te quedarás en la calle, no porque se me haya olvidado todo lo demás.

–Lo siento mucho Yeonjun, todos los días me arrepiento tanto. Ojalá pudiéramos...–volvió a ser interrumpido.

–No, no podemos –aclaró con autoridad– Puede que hayamos terminado bien pero aun así no ha sido fácil no tenerte en mi vida, no estoy listo para actuar como si nada hubiera pasado.

Junnie...–usó aquel particular apodo que por mucho tiempo uso con cariño hacia el castaño, cosa que por alguna razón le hizo enfurecer.

–Ponte cómodo con confianza, buenas noches –se dió la media vuelta yendo a su propia habitación.

Era verdad que no odiaba a Soobin pero le pareció un poco cínico de parte que usara aquel nombre en particular.

Una vez dentro de su cuarto no pudo evitar soltar un par de lágrimas y lanzarse avergonzado a su cama, cubriendo con su almohada su rostro para que ni siquiera Dios pudiera ver su llanto. Creía haber superado todo, que ya no era importante en su vida y podia seguir con normalidad.

Probablemente aquello no era cierto.

"Creo que sí es una mala idea"













-🗝️🚪
Holi!!
Después de un tiempo estoy de vuelta jeje
Espero les guste el concepto y perdonen alguna falta de ortografía uwu

Besos xoxo

Bad idea, right?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora