1

497 31 25
                                    

El aire de primavera ondeaba su vestido blanco, Lee Minsoo caminaba por los pasillos de la universidad robando miradas, su cabello castaño se mecía a cada pasó y el sonido de sus tacones cortaban las charlas de los presentes haciéndola el centro de atención.

—El sonido de tus malditos tacones me molesta — Gruñó su hermano detrás de ella.

—¿Te podrías callar Min?, estoy teniendo  mi momento de protagonista —Murmuro Minsoo alisando su cabello sin dirigirle la mirada al pelirrojo.

—Déjame decirte querida que no eres la única a la que observan — El pelirrojo se cruzó de brazos.

La castaña puso los ojos en blanco ante el comentario, estaba consiente que su hermano Lee Minho no solo era atractivo, su nariz perfilada, lindos ojos marrones y su cuerpo trabajado por el gimnasio lo hacían  demasiado  deseable para chicos y chicas, Minho era la definición de un hombre varonil.

“Tan varonil, que le gusta que se la metan”

La castaña soltó una ruidosa carcajada por sus pensamientos impuros dejando al pelirrojo desconcertado.

—¿Te has vuelto loca? — Preguntó su hermano.

—No Min, solo estaba pensando en lo versátil que eres — Minsoo llevo su mano a su boca para reprimir su risa.

El pelirrojo estaba confundido pero decidió dejarla en paz, Minsoo solía ser espontánea y algo extraña cuando quería.

Repentinamente un chico chocó con ella, la castaña estaba tan ensimismada burlándose mentalmente de su hermano que no le dio tiempo de reaccionar, el chico tenía en sus manos un bote de tinta roja provocando que su vestido blanco tuviera una gran mancha carmesí.

Minho retrocedió unos pasos cuando vio a su hermana congelada en el pasillo con una cara de horror, el chico hizo una reverencia exagerada, repetía una y otra vez “Lo siento, soy tan torpe, lo siento”

—¿Torpe? ¡pero si eres un grandísimo..! —Minsoo quedó boquiabierta al ver al responsable.

Lentes redondos y una mirada miserable, su camisa de franela roja estaba mal abotonada y su cabello negro desordenado, sus mejillas abultas estaban sonrosadas por haber corrido.

—No te preocupes ese es el vestido más feo que ella tenía, soy Minho y ella es mi hermana  Minsoo — La castaña observo a su hermano pasar a su lado y despeinar el cabello al chico, como respuesta sus mejillas se enrojecieron más.

Lo impactante era la brillante sonrisa en los labios de Minho, Minsoo llegó a creer que su hermano había perdido la capacidad de sonreír pero justo en aquél momento tenía una muy boba.

—En verdad lo lamento, puedo prestarte mi suéter para cubrirte, Mi amigo dice que soy tonto por traerlo conmigo todo el tiempo pero en estos momentos creo que es muy buena idea — El azabache se agachó y coló su mochila en el suelo buscando la prenda.

El pelirrojo se rio por lo rápido que hablaba el chico, volteo a ver a su hermana  y le guiño el ojo izquierdo.

—¡La encontré! —Exclamó el azabache—Toma.

Con su mano extendida hacia Minsoo le ofreció una sudadera de gran tamaño color gris con una alas pintadas en la parte trasera.

—No me pondré eso — Dijo con horror la castaña frunció el ceño.
El chico desvío la mirada ante la negativa.

—Esta bien — Abatido formo un mohín en sus labios.

Los gestos del azabache hicieron que Minsoo se sintiera culpable.

BUBBLEGUMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora