El mundo sin piedad

Conclusiones

Ha sido un largo viaje y una carrera bonita, me alegro de haber corrido con todos ustedes, mis lectores, hasta la meta. Pero esto no acaba aquí, solo es el comienzo, espero que lleguemos a más personas y que todos puedan disfrutar de una obra a la que le he puesto mucho esfuerzo y corazón, y debo admitir que llegar hasta aquí no ha sido nada fácil, ha costado y han habido muchos problemas, pero lo hemos superado. Un libro que a pesar de que no tiene una dirección en sí y no es más que simples poemas tirados al azar del papel dañado, pueden llegar a lo más profundo de una persona si realmente lo desea. Hallamos contradicciones, dolor, amor, tiempo, consejos, experiencias y muchas cosas que verdaderamente tocan tu corazón, o al menos lo ha hecho en mí al escribir; podemos apreciar en el capítulo uno: más que literatura pura y profunda, la esencia de la sencillez e inocencia de un ser que no ha vivido nada aún y que le queda todavía mucho más por vivir de este período de su vida, pero que aún así en la simpleza de las palabras halladas, muchos de nosotros no podemos llegar a identificar e, incluso, validar como verdad lo que está escrito. En el capítulo dos y tres no encontramos nada más que sensaciones de pura pasión de amor y un desgarrante aura que transmite nomás que verdadero dolor. En el capítulo cuatro ya vemos algo distinto, algo como comprensión, por fin se llega a notar algo de madurez y búsqueda de perdón. El capítulo cinco son las ganas de un final pacífico, son huellas de que quiere que acabe ya, pero que aún así puede seguir y tomarlo con alegría, es la simplicidad con la que empezó el primer capítulo, pero está vez dando un toque de tranquilidad y sabiduría al asunto. Y con esto, queridos lectores míos, yo, Anty Ow, les estoy dando la conclusión de "El mundo sin piedad".

Muchas gracias...