Headcanon Cod (+18)

Ghost "Simon Riley" (Celos obsesivos)

Horas antes del suceso:

-Tuvimos mucha suerte de salir vivos de aquella misión , fue un horror.. menos mal que te tuvimos a ti , T/N..

*mi compañero de equipo extendió su brazo para tocar mis hombros y luego darme un abrazo , pensé que era lo lógico del compañerismo además de la tensión que vivimos todo el equipo , así que lo dejé pasar.. (mala idea , siempre estuve vigilada)*

Cuando llegué al vuelo de regresó , Simon me hizo el vacío intenté hablar con él ya que normalmente no demostraba sus sentimientos y pensamientos tan fácilmente además de que delante de su equipo siempre debía mantenerse como un líder fuerte y correcto. Pero sabía que le ocurría algo , así que decidí esperar a llegar a nuestra habitación de la base.

Caminamos juntos en silencio por los pasillos , hasta que sentí como con todo su cuerpo y sus manos me acorraló contra una pared y sonó un ruido sordo. Sus ojos me ardían y parecían descubrir mi alma , parecía enojado y a la vez como si le fuera dado un motivo para ser su maldita presa a punto de ser capturada y comida. Su respiración era superficial y algo dificultosa incluso debajo de su pasamontañas sabía que su mandíbula estaba tensa y chirriaba sus dientes como salía hacer cada que le molestaba algo.

-¿Sabes? Pensaba que había dejado claro que eras solamente *mia y de mi propiedad* , pero tendré que hacerlo más obvio esta vez

*No me dejó responder , aún estaba intentando procesar toda esta confusión. Nunca se mostró tan posesivo e intimidante como ahora , pero toqué su punto débil y es algo que nunca. NUNCA , deberías de probar con alguien dominante*

Regresamos a nuestra habitación y en cuánto cerró la puerta tras de nosotros me subió encima de él con sus brazos grandes y fuertes hasta la altura de sus caderas , mientras yo instintivamente entrelazaba mis piernas a su alrededor. Sus besos ya no eran lentos y románticos , eran apasionados y violentos como si fuera a devorar a su maldita presa en cualquier momento. Sus dedos rasposos me desgarraban dentro de mi uniforme tocando mi piel desnuda , mientras que sus dientes daban pequeños mordiscos en la parte más frágil y sensible de mi cuello , la tensión entre nosotros dos era casi insoportable. Estaba abrumada por el placer , y sólo podía escuchar levemente mis jadeos sincronizados con los suyos.

Rápidamente me bajó de sus caderas y su cuerpo para hacerme sentar en su cama , me desprendió de toda mi ropa con agilidad y me dejó completamente a su merced sólo con mi ropa interior. Expuesta a su mirada fría y de depredador sobre mí , mi cuerpo temblaba ligeramente pidiendo compasión algo que NUNCA obtuve de él.

-Has sido una niña traviesa hoy , y ya sabes lo que ocurre cuándo juegas conmigo , querida..

*Bajó con sus dedos desde mi abdomen lentamente hasta mis braguitas casi transparentes y ligeras al tacto , sentí un hormigueo de placer cuando sin siquiera rozar mi clítoris ya me tenía mojada y con mis piernas temblando. Siguió bajando testeandome con su mirada mientras yo sólo podía gemir y cerrar mis ojos , había encontrado mi punto exacto pero no lo estaba frotando sólo estaba disfrutando molestándome y eso me volvía loca. Sentí como la tela empezó a crujir cuándo vi que rompió mis braguitas , las tomó en sus manos y las olisqueó como un perro ante mi mirada sumisa y de deseo. De su pantalón sacó unas cuerdas rojas delgadas , las mismas que utilizaba cada día a cada hora para mantenerme inmovilizada a su merced*

-No voy a perdonarte que me pusieras celoso con ese "compañero tuyo" , hoy no obtendrás tu placer.. hoy serás mi pequeño juguete pero tranquila te encantará serlo.

*Me terminó de quitar el sostén y me ató las manos al frente de mi pecho para luego elevarlas hasta la altura de mi cabeza , me cogió en peso y me tumbó en sus piernas mientras mi trasero estaba ligeramente elevado en su mano tenía una fusta negra que pasó por toda mi espalda haciéndome recorrer pequeños escalofríos , la fue llevando lentamente hasta mi espalda baja y empezó a acariciar lentamente mis glúteos hasta que sentir un pequeño picor en mis nalgas mientras jadeaba. Cuánto más fuerte jadeaba más fuerte me pegaba con su fusta , sentía el placer del dolor y la excitación recorrerme. No sé ni cómo terminé en esta situación pero no quería que se detuviera. Cogió mi cabello y tiró de él haciendo una pequeña coleta con sus manos y me susurró al oído*