El llamado

Capitulo 1 Quien eres

Jueves 18 de Septiembre

Pamela: Buen día, en donde se encuentra el área de estantería, se necesitan herramientas para el ultimo  piso

Acacia: Jovencita, vienes de algún otro hospital o realmente trabajas aquí

Pamela: Disculpe señorita Acacia, por falta de personal no tuve capacitación y al parecer el hospital se encuentra en condiciones fatales

Acacia: Bien, con quien te asignaron

Pamela: Con el doctor Agustín Pantaleón

Acacia: Segundo piso, giras a la derecha llegando a la puerta numero 45, hasta el fondo de la ultima puerta, te asignaron llaves?

Pamela: Ninguna señorita

Acacia: Toma, mas vale que te apresures (suspira, mirando la computadora)

-Pamela: Gracias Señorita

Pamela pudo sentir el desagrado y la mirada desafiante que le daba Acacia hacia ella, aunque no le tomo mucha importancia después de todo, tenia que lidiar con todo tipo de personas sean agradables o groseras. Apresuraba el paso y al llegar al elevador, las bocinas del hospital nombraron su nombre sobre su requerimiento.

Llegando al segundo piso noto que los pasillos estaban completamente abandonados

- Pamela: En verdad atienden pacientes en este lugar

No se distrajo mas en sus pensamientos y comenzó a apresurar el paso, efectivamente a través del cristal había personas recostadas, aunque lo extraño es lo abandonado y sin personal o familiares al lado de la gente, el ultimo pasillo de la derecha se encontraba un enfermero revisando lo que parecía una joven, no presto mucha atención y enseguida abrió la puerta de la estantería

Pamela apresurada buscaba las herramientas que no había notado que las bocinas seguían mencionando constantemente su nombre.

Al llegar al elevador el enfermero que había visto en el ultimo pasillo corrió para alcanzar el elevador

- Eyyy espera, lo lamento, como habrás notado no tenemos mucho personal y me encargaron estar en este piso, Evan mucho gusto

-Pamela un gusto

Evan: Me hubiera gustado charlar mas pero, tengo prisa

Al irse Evan del elevador Pamela estaba a un piso mas para llegar al ultimo, en cuanto las puertas se abrieron jamás había caminado tan rápido como antes, tan solo un poco mas de velocidad y en lugar de caminar corría. A lo lejos logro observar al doctor

Pamela: Doctor, lamento la demora, en seguida preparo los instrumentos para que empieza a trabajar

Agustín: Sta. Pamela estuve a punto de mandar a otra enfermera, menos mal y no lo hice, anda menos platica y prepara la mesa de trabajo.

- Aunque parecía un hombre estricto y mal humorado en el fondo me agravada

1:15 am

Cuando estuvo a punto de recoger sus cosas, Pamela recordó que había olvidado las llaves pegadas en la puerta para entrar en la estantería, apresuro a guardar todo en su bolso y se dirigió hacia el elevador orando por que aun estuvieran ahí.

Al llegar nuevamente al piso se volvió a sentir incomoda, aunque esta vez habían algunos doctores en los pasillos, al caminar pudo notar algo que colgaba en la puerta, eran las llaves en el mismo lugar.

Antes de recogerlas sintió en la ultima puerta como si alguien la observara y decido regresar a ver que todo estuviera en orden, al entrar reconoció a la joven que revisaba Evan, y ella la observaba atentamente sin decir una palabra

Pamela: Todo en orden cielo

Pero la joven no respondía solo miraba atentamente, Pamela se acerco y al notar que no tenia respuesta, salió y decidió llamar al doctor que se encontraba cerca

- Doctor, doctor

La joven de la ultima puerta al parecer no reacciona tan solo me observaba sin decir una palabra, al escuchar a Pamela comenzó a ponerse pálido como si hubiera visto un fantasma y respondió

-Hablas de la joven que esta en la puerta numero 45

Pamela: si, la joven de cabello castaño y ojos grises casi negros

El doctor corrió apresuradamente a la puerta e indico a Pamela que llamara a mas personal, pero a todo esto, quien era aquella joven.