Harry estaba en sus clases de universidad faltaba menos de una hora para poder ver a su alfa y acurrucarse en su regazo, su clase estaba más aburrida de lo normal, no aguanta la hora de salir. Para no aburrirse estaba bromeando un poco con su alfa por mensajes.
Sintió su celular vibrar y alzó su mirada para poder tomarlo, al leer el mensaje no pudo evitar sonrojarse.
El mensaje su alfa venía con una foto de él mostrando su regazo con una descripción de "¿Entonces no quieres saltar aquí?" "Yo creo que se ve bastante cómodo".
Amaba brincar en su alfa y sentir como el lo tomaba fuertemente de su cintura para poder alzarlo y sentir las penetraciones más profundas, sintió que su aroma estaba más dulce y decidió tranquilizarse ya que no quería que su clase se dieran cuenta que estaba lubricando.
Termino la clase y solo tomo sus cosas para salir corriendo sin despedirse de nadie, al salir de la universidad vio al chófer de louis que ya lo estaba esperando por él.
—Buenas tardes señor styles.–saluda mientras habré la puerta.
—Hola albert ¿como te va?.
—Muy bien ¿como le fue?.–pregunto mientras se hacía un lado para que harry pudiera entrar, harry entro y cerró la puerta para él para después dar la vuelta y subirse al auto.
—Ya sabes, agotador como siempre, pero me gusta.
Albert solo soltó una pequeña risa ya que varias veces a escuchado a harry decir que odiaba su carrera de psicología y otra veces decir que la amaba.
Harry estaba desesperado por llegar y estar con su alfa, el camino se le hacia eterno, después de unos minutos se dio cuenta que ya habían llegado a la empresa de louis, albert le abrió la puerta y este agradeció. Camino para poder entrar y vio como todos en el piso se le quedaban viendo, decidió ignorarlos y no le dio tiempo de saludar a quienes le hablaron, el en realidad quería ir con su alfa lo antes posible.
Subió al elevador y oprimio el botón correspondiente para llegar al piso de su alfa, después de unos segundos las puertas se abrieron y este camino hacia la oficina.
—Lo siento pero el señor tomlinson no quiere que nadie lo moleste.–Harry volteo a ver al odioso secretario de su alfa.
— Si, pero yo no soy nadie, yo soy el omega del señor Tomlinson.
—Solo estoy siguiendo las ordenes de mi jefe.–dijo indiferente, como si las palabras del rizado en realidad no le hubieran afectado.
Harry suspiro frustrado y siguió su camino, aquel ser no era de su agrado desde hace varios meses desde que le llego el chisme de que aquel omega estaba enamorado de su alfa y eso no le hizo mucha gracia.
Abrió la puerta y asomo su cabeza y algunos de sus rizos se asomaron.
—Alfa.–llamo harry en un sollozo.
Vio como louis alarmado alzó su mirada al escuchar aquel sonido que hizo su omega, rápidamente se levanto de su asiento para poder ir hacia el.
—Mi pequeño bebé ¿Qué pasó amor?.–preguntó preocupado.
—Tu tonto secretario no me dejaba pasar.–sollozo siendo caprichoso.
—Perdón amor, fue una orden que di. Se me olvidó decirle que tu siempre puedes pasar.
—Pero no es justo, correlo.
Louis al escuchar eso comenzo a reír, sabía las intenciones de su omega caprichoso.
—Ven omega, vamos a sentarnos.–Cargo a harry de los muslos y se dirigió hacia su escritorio, se sentó y acomodo al rizado en su regazo, este rápidamente se acomodo y escondió su cara en el cuello de su alfa para poder olerlo mejor.
