Minino

18

- ¡ay no! - paro justo en la entrada - estúpido, mejor me regreso a casa...

- entra no seas cobarde - empujó a Yibo e inmediatamente las miradas cayeron sobre el.

‧⁺◟(🐺🧶)◡̎✧

- ¡Ziyi! Ya basta, deja en paz a mi omega o juro que habrá consecuencias...

- per...

- pero nada! Lo que tuvimos fue solo sexo y nada más y te lo dejé en claro desde el primer momento ¡deja de insistir en tonterías! Al que amo es a Yibo entiendelo... - salió del salón de clases.

Se encontró a Yibo en el pasillo mientras hablaba con el Yubin ese, sintió un golpe en su espalda y efectivamente era jimin.

- Qué quieres jimin?

- ya, deja el drama, no me gusta tu omega...Aunque permíteme decirte que tienes suerte, es bellísimo, lástima que sea tan insoportable sino te lo robaba. - sonrió victorioso al ver como Zhan se puso celoso y camino hasta Yibo.

- te digo A-Yu, llevale girasoles las rosas son feas...

- no A-Yi, te dije que no le gustan las flores...

- entonces llevale gomitas.

- ¡omega! - abrazo a Yibo - omegita de mi corazón, ya no te enojes, ya puse a Ziyi en su lugar ¿Ya no estás enojadito?

Yibo quería reírse, pero se contuvo, un poco, poquito, solo sonrió de lado, mostró un poquito - casi nada sus perfectos colmillitos, ¡A quién engaña! Sonrió en grande y correspondió al abrazo, casi-casi besando a Zhan, sus respiraciones estaban chocando entre sí y sus labios casi tocándose enviando un toque de sensualidad y un choque eléctrico a ambos cuerpos.

- sigo molesto contigo~ - hablo sobre los labios contrarios sin llegar a besarse todavía - tonto pulgoso~

- lo sé soy un tonto, y tu eres mi minino salvaje~ - sonrió.

Unieron sus bocas en una perfecta sintonía que poco a poco se hizo más intensa restándole importancia a todos los demás estudiantes que pasaban por el lugar y a Yubin que mejor se retiró antes de ser mal tercio.

Sus pulmones empezaron a exigir aire y se separaron con las respiraciones aceleradas, los labios un poco hinchados y con el Omega todavía con sus piernas enrolladas en la cintura de su alfa. Ya con la respiración normal y con más tranquilidad, el Omega fue el primero en hablar: - alfa, escúchame - Zhan con el rostro enterrado en su pecho asintió - eres mío, mío, y no quiero que ninguna Omega se te acerque, no como Ziyi, solo yo. Entendido?

Cuando Zhan separó su rostro del pecho contrario tenía una enorme sonrisa de oreja a oreja, su minino celandolo es tan, tan, tan hermoso.

- pero...Mi primita es Omega y tiene 4 años ¿Tampoco dejo que se me acerque? O mi tía a la que fui a visitar o...

- No, ellas sí pueden pero...¡Ahg! Olvídalo alfa. - de un pequeño brinquito se poso en el suelo de nuevo y en estos momentos antes hubiera golpeado a Zhan pero no sabía que hacer, ¡El tonto viéndole el trasero de nuevo!
Se volteó y Zhan lo miro atento

- deja de verme así

- no puedo, mi Omega es tan hermoso...- volvió a abrazar por detrás a Yibo y apretó su cintura un poco.

- Zhan...
- ya, ya, está bien dejo de molestarte solo si me das un besito. - hizo un "piquito" con sus labios y Yibo lo beso. - me gustó.

- de acuerdo, tenemos que ir a clases ahora.

‧⁺◟(🐺🧶)◡̎✧

Ambos estaban en en la habitación del Omega, uno se sentía incómodo ya que el solía mantener todo desordenado ya que nadie entraba a su habitación además a pesar del "desorden" el sabía perfectamente dónde se encontraba todo para él estaba perfectamente ordenado.

Y el otro se sentía en las nubes, un espacio en el que solo estuviera presente el olor a Yibo, era la luna.

- muy bien, bajemos...Nuestras madres ya deben de haber servido la comida - trato de llevarse al alfa pero este lo jalo haciendo que ambos cayeran a la cama y Zhan estuviera encima de él.

Ninguno dijo nada no queriendo arruinar el momento con palabras, solo se quedaron ahí mirándose fijamente mientras sus respiraciones chocaban y sus miradas de demostraban el gran amor que se tenían, el primero en romper el silencio fue el alfa.

- minino, te amo...

Yibo sonrió y beso a su alfa rompiendo cada pizca de espacio entre ellos, el beso era tranquilo, sin prisa, parsimonioso, demostrandose cuánto se amaban, así durante unos minutos, cuando se separaron el Omega hablo.

- yo también te amo alfa. - recordó el desastre en su cama, nunca ordenaba su cama, no veía necesidad. - vámonos - insistió - bajemos a comer, podemos charlar también en la sala...

- Porqué quieres irte? - pregunto cayendo a un lado del pequeño cuerpo contrario y lo atrajo más a él disfrutando de todo su delicioso aroma. Enserio eso parecía una especie de narcótico. - déjame disfrutar de un lugar en el que solo está tu aroma por favor. - hablo somnoliento, era tan relajante.

- pero mi cuarto es un desorden...

Zhan rio un poquito y muy bajito - sé a la perfección que parece que está desordenado pero para ti todo solo está ubicado a la mano y sabes dónde se encuentra todo... No me molesta, así eres tú y como siempre, me gustas.

- ¿Cómo puedes conocer tanto de mí?, ¿Me espías?

- eres tan legible para mí, además seré tu compañero de vida, es mi deber saberlo - volvió a sonreír.

- ¿Compañero de vida?, ¿Enserio quieres pasar tanto tiempo conmigo? - hablo sorprendido dándose vuelta para quedar cara a cara con el adormecido alfa.

Esté asintió con los ojos cerrados - algún día te diré: minino bonito, dueño de mi corazón y de mi alfa, puedes aceptar casarte con este tonto pulgoso que intentará con todas sus fuerzas hacerte feliz por el resto de tu vida, además puedo ser un buen rinconcito de abrazos y besos si algún día te sientes triste...Juro no dejarte solito nunca y jamás ir a la cama por las noches si estás triste o estamos peleados, podemos resolverlo. Nuestro amor es para siempre, siempre lo ah Sido y siempre lo será. ¿Puedes? Y entonces tú dirás sí y tendremos un hermoso bebé.

- Cómo sabes que diré que si? - inquirió acariciando suavemente el cabello de su alfa.

- porque me amas...Tanto como ya a ti...Por eso.

- ¡Chicos la comida está lista!