Hay días en los que solo quiero gritar, correr y alejarme de todo y todos.
Hay días en los que no puedo evitar preguntarme si me amas . . .
Rara vez estas en casa, siempre estas trabajando, la única vez que te veo es cuando salimos a patrullar.
Te veo y puedo observar lo cansado y estresado que estás, así que me mantengo callado y procuró hacer todo bien para no molestarte.
Pero . . . Me pregunto si me amas, porque a Drake siempre elogias su intelecto, a Grayson siempre felicitas por su desempeño en las misiones, y a Todd siempre dices cuanto lo amas . . . Pero y yo?
También soy tu hijo, sin embargo desde que llegue no he recibido una caricia tuya o una felicitación, únicamente me diriges la palabra cuando vas a darme una orden o vas a sermonearme por haber sido muy brusco con los criminales.
Se . . . Se que no me escogiste como a los demás pero . . . Pero también soy tu hijo, tengo tu sangre, tanto como Drake, Todd y Grayson necesitan de ti, necesito yo. No pido mucho, solamente un "Buen trabajo Robin", "Bien hecho" o "Te amo" . . . Con una palabra o una simple caricia me basta . . .
Pero no hay nada . . .
Papá . . . Tu . . . No me amas?
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