Capítulo 2

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Blake estaba actuando raro otra vez.

Ruby fingió concentrarse en su tarea, garabateando tonterías con un bolígrafo en la página mientras sus ojos vagaban inútilmente sobre las palabras de su libro de texto de historia. Por más aburrido que pudiera ser, no era el tema lo que estaba causando su problema, sino más bien la sensación de unos ojos color ámbar quemándole un agujero en un costado de su cabeza. No por primera vez esta semana, Ruby se preguntó cuál era el trato.

¿Había molestado a la chica mayor de alguna manera? Ella no lo creía. Blake no parecía enojado con ella, y no era como si hubiera hecho nada digno de tales sentimientos. Bueno, a menos que contaras esa vez que se comió todo el pastel de queso que Weiss había ordenado con cariño para todos. Realmente había sido tan delicioso, solo recordar el sabor le hacía salivar la boca. Su pareja tenía muy buen gusto cuando se trataba de ese tipo de cosas.

Pero Ruby dudaba que se tratara del pastel.

¿Quería preguntarle algo? De ser así, tenía muchas oportunidades para hacer precisamente eso. No era como si no estuvieran hablando entre ellos. Incluso habían estado juntos en Estudios Grimm ese mismo día, pero habían seguido con sus actividades como de costumbre. Si quería hablar de algo importante, ¿por qué no lo había hecho?

¿Tal vez tuvo algo que ver con el Colmillo Blanco? Eso podría explicar su vacilación, ya que era un tema muy delicado para el fauno felino. Realmente no necesitaban que se repitiera lo que sucedió cuando Weiss y Blake tuvieron su discusión épica. Casi había fracturado a su equipo. Blake ya había demostrado que tenía problemas para hacer algo tan simple como pedir ayuda, así que ¿tal vez debería dar el primer paso? Quitarle la carga de encima, por así decirlo: era algo típico de un líder, ¿verdad? Y Ruby siempre quiso ser la mejor líder de todos los tiempos.

Urgh, ser socialmente incómodo realmente apestaba en momentos como estos.

Ruby giró ligeramente la cabeza y miró a su compañera de equipo por el rabillo del ojo. El simple movimiento de girar la cabeza un centímetro había asustado a la niña mayor, cuyos ojos color ámbar se escondían detrás de una de sus muchas novelas. Ninja lujurioso o algo así, no estaba muy segura. Ruby continuó mirando, contando los segundos hasta que esos ojos escrutadores reaparecieron. Justo cuando estaba a punto de darse por vencida, Ruby vio a Blake mirar por encima de su libro, sin darse cuenta de que Ruby todavía la estaba mirando.

Sí, Blake definitivamente estaba actuando de manera extraña.

Al tomar una decisión, dejó el bolígrafo y estaba a punto de pronunciar el nombre de Blake cuando Ruby escuchó su pergamino vibrar sobre el escritorio, ensordecedor en la habitación silenciosa. Blake se agachó detrás de su libro una vez más mientras Ruby alcanzaba su pergamino, una sonrisa adornó su rostro cuando vio al remitente. La rareza de Blake fue olvidada instantáneamente.

4:30 PM Chico Vómito: ¿Nos vemos a las 7?

Ruby sonrió emocionada mientras respondía rápidamente.

4:31 PM Cara del cráter: ¡Sí, por favor ~! 3

Ruby sintió ese familiar estallido de nerviosismo estallar en su estómago, una masa retorcida de Grimm dando vueltas en su interior. No importa cuántas veces se encontraron, ella siempre se sintió así. Uno pensaría que después del primer par de veces se habría acostumbrado, pero no tuvo tanta suerte. Aunque no era como si odiara la sensación; lejos de ahi. Fue un recordatorio de lo mucho que lo esperaba, de lo mucho que significaba para ella. Era un recordatorio de lo importante que era, de lo importante que era él para ella . Fue el comienzo de la construcción, esa dulce anticipación que continuó creciendo y creciendo y creciendo hasta que no pudo hacer más que estallar dentro de ella.

Descubrimientos ilícitosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora