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Esa noche recibí un mensaje de un número desconocido

"Cada día estás más hermosa, tienes mejor cuerpo que cualquier mujer adulta, toda una damita como siempre supe que serías, espero te portes bien como lo has hecho hasta ahora"

Un escalofrío se hizo presente, que asqueroso y ni siquiera sabía de quien se trataba, pero me observaba y eso me preocupaba

Decidí bloquear el número y acostarme a dormir

Toda la semana recibí mensajes de ese tipo, alagando mi forma de vestir, mi cuerpo, mi aroma, cabello, piel entre otras cosas pero eran de manera asquerosa, lo único que hacía era ignorar los mensajes o bloquear los números

Estábamos en clase pero yo tenia mi cabeza sobre mi mano mirando el libro, ni siquiera noté cuando parte de mi cabello cubrió mi rostro hasta que alguien lo puso detrás de mi oreja

Zhuang: Estás muy distraída, todo bien?

T/n: Estoy un poco cansada

Zhuang: Últimamente has estado muy seria

T/n: Si, no he podido dormir bien

Profesora: Señorita T/n, conteste la actividad del pizarrón porfavor

Asentí y hice lo que me pidió

Lo hice y al revisarlo asintió

Profesora: Muy bien gracias, señorita Jane le pido que deje de burlarse o quiere responder lo que sigue? Le recuerdo que sus calificaciones van muy mal

Jane: No profesora, lo siento

Hizo mala cara haciéndome sonreir, volví a mi lugar y las clases fueron tranquilas hasta el receso

Había ido a caminar con Zhuang de la mano, estábamos en la parte trasera de la escuela afuera de los talleres, se recargó en la pared sin soltar mi mano

Zhuang: Linda, segura que estás bien?

T/n: Si, no te preocupes

Desvíe la mirada pero tomó mi mentón haciendo que lo mirara a los ojos

Zhuang: Conozco tu mirada, algo te preocupa

T/n: Me preocupa la mirada de Jane, tiene algo en su mirada que no me gusta y ya no me a molestado, me preocupa que va a hacer ahora

El sabia cuando mentía así que lo abracé acostando mi cabeza en su pecho para ocultar mi rostro

Zhuang: No hará nada mi amor

T/n: Y tu? También has estado muy serio

Zhuang: El entrenamiento, es agotador

Asentí y me acosté en su hombro

Meses después...

Zhuang había faltado a la escuela así que volví sola a mi casa, pero en el camino un auto se detuvo junto a mi y un hombre salió de el, su cara estaba oculta bajo un pañuelo y lentes oscuros, me tomó por la espalda y cuando me alzó para meterme al auto puse los pies en el techo del auto y me Impulse asia atrás haciéndolo caer y cuando corrí sentí un piquete en el cuello y de inmediato perdí la conciencia

Matrimonio a la fuerza Donde viven las historias. Descúbrelo ahora