10.

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-9 meses. Vicente no apareció nunca más en la vida de Rodrigo ni de Teo, la última vez que lo vieron fue en una historia de instagram diciendo que sería papá, que estaba comprometido con una mujer maravillosa y otras cuantas babosadas.-

-Rodrigo no pudo evitar sentirse terrible al ver eso, o sea que Vicente realmente los había abandonado para siempre, a él y a su pequeño hijo. Fueron 3 años de relación en los que los últimos 2 fueron un sufrimiento para el castaño, y ahora que ya estaba libre, se seguía sintiendo algo mal, 3 años de relación para que un día él solo aparezca diciendo que esta comprometido y que tendría una hija, abandonando a su hijo.-

-Más que nada le dolía por Teo, pero a Teo no parecía importarle, Teo se la pasaba en los brazos de Iván, siendo mimado. Iván era un buen padre, le daba a Teo tanto cariño como cosas materiales, era el niño más mimado gracias a su nuevo papá, y Rodrigo solo atinaba a sonreír embobado al verlos juntos.-

-El castaño se pasaba gran parte del tiempo al lado de su hijo e Iván, amaba ver como ellos se llevaban muy bien, como se entendían a la perfección. Nunca sintió que Vicente entendiera a Teo, siempre lo trato como alguien distinto, como un animal exótico, como si ser autista hiciera a Teo alguien extraño. En cambio, Iván estaba fascinado con esto, ver el mundo de otra manera era interesante, era interesante escuchar a hablar a Teo sobre todo lo que le gustaba con total emoción, siempre tenia un dato nuevo para dar, siempre algo para decir Iván nunca se aburriria de conversar sobre cualquier cosa con el pequeño.-

-Pero ahora Rodrigo se sentía mal, porque ahora que no tenia como pagar la casa la cuál antes Vicente pegaba, tuvo que mudarse... Con Iván. Se sentía incómodo, se sentía un aprovechado, pero Iván insistía en que esto era lo mejor que pudo haber pasado, y que estaba muy feliz de tenerlo allí, en esa casa tan grande y elegante.-

ㅡTranquilo, ya te acostumbraras. Mira, hasta Teo ya se adapto, le encanta el jardín.

ㅡNo me gusta molestar...

ㅡNo me molestas. Es como vivir en familia, es normal. Además, odio estar solo en esta casa, es muy grande como para una sola persona, y me sentía solo.

ㅡBuscaré trabajo entonces, para ayudar con los gastos.

ㅡNo... Debes cuidar a Teo, no podes buscar un trabajo.-Ladeo su cabeza confundido.-Bueno, no ahora... Es que, Rodrigo... De verdad no quiero que sientas que estas en deuda y que debes pagarme, ¿sabes cuanto dinero tengo? a mi no me interesa gastar un poco mi dinero por el bien tuyo y de nuestro hijo, de hecho me gusta hacerlo.

ㅡPero... Es que yo... No quiero deberte dinero cuando nos dejes...

ㅡ¿Seguirás diciendo esas cosas? ay dios, como odio a ese Vicente de mierda...-Lo abrazo.-No me vas a deber dinero y no te voy a dejar, punto. ¿Querés pagarme de alguna forma? podrías ser el amo de casa, encargate de cocinar y de limpiar. No quiero que te preocupes de nada más que de cuidar la casa, de cuidar de nuestro hijo y de divertirte.

ㅡMmh... Esta bien, pero haré mi mejor esfuerzo para mantener todo impecable, te lo prometo, tu casa quedara hermosa.

ㅡNuestra casa.-Entró a la habitación.-Uh, acá esta mi pequeñito. Buenos días príncipe, ¿ya estas listo para que vayamos a dejarte a la escuela? será la primera vez que vamos los tres.

ㅡ¡Buenos días papi! ¡ya estoy listo! uh, ¡buenos días mami!

ㅡBuenos días mi bebé.-Se agacho a su altura y arreglo su remera para luego amarrar los cordones de sus zapatos.-Que niño más independiente, te arreglaste solito.

ㅡPara que no tuvieras que hacerlo vos, mami.-Lo abrazo.-¡Tomemos desayuno y vayamos rápido!

ㅡOkay, vamos.

Please be my dad! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora