Crecer a tu Lado

Junto a ti

Hola! Un poco tarde XD

Pero bueno. Espero no perder ritmo.

Oh. Garnela es mi nombre de base para la alta princesa o guerrera minotaura que sale en muchas escenas pero nunca dice nada en la serie XD ¿la de piel roja y cabello negro que intenta cornear a Adora en el segundo cap? Hay un arte de ella con Angela... Ya me estoy yendo por las ramas y esto es fluff.

Día 6. Desayuno en la cama.

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Acampar con la Rebelión no era nada como acampar con la Horda.

En la Rebelión también existía cierta disciplina, y caos de tanta gente junta con poca privacidad, pero había un esfuerzo más por hacer la situación... confortable. En la Horda era todo orden y precisión, más preocupados por encontrar lugar para acomodar las cajas de provisiones que por darle comodidad a las tropas.

Para Scorpia la pequeña tienda que le habían dado, incluso con un mueble rectangular con sus propios cajones y un espejo... ¡Era una maravilla que encontraran lugar para eso en vez de otro barril de vino! Bueno, incluso con su pequeña tienda (en comparación a la de Adora u otras princesas) era totalmente fabulosa.

Se despertó a la mira de siempre, con una sonrisa a pesar de la difícil situación que estaban atravesando, pero mantener una rutina estable dentro de todo era muy saludable, y con tanta tensión corriendo, necesitaba aferrarse a algo. Y nada como sus afirmaciones matutinas para empezar cualquier día. Todos los días.

—Tender la cama. Listo —dijo animada a la nada —Lucir genial —se miró al pequeño espejo —Muy list-oh. Oh, no, no, amiguitos, es hora de retocar esto —dijo al ver que su perfecto rapado ya estaba unos milímetros crecido. Con cuidado uso sus confiables pinzas para modelar su corte. —Corte, listo.

Después de revisar minuciosamente su corte, respiró profundo y se miró directo a los ojos en el reflejo.

—Aplastar mis inseguridades: listo. Soy valiente, fuerte —flexionó sus bíceps— leal, doy grandes abrazos y voy a ser la mejor amiga que pueda ser —una risita dulce, que empezaba a serle familiar y bienvenida llegó desde que había llegado a la Rebelión.

—Muy buenos días, Scorpia —la princesa de las flores llegó con una pequeña bandeja circular entre las manos, usando sus pasos ágiles y gráciles para entrar de lado por la puerta de tela de la tienda, y dejar que por un momento el sol se colara y tocara su cabello —Te saludo a ti y a tus maravillosas vibras matutinas. Yo también tengo un ritual diario de meditación para empezar el día con mi mejor versión posible.

—Oh-oh, buenos días, Perfuma. Es solo... algo que hago, ¿Sabes? Levantar el ánimo y todo eso.

—¿Puedo? —señaló la cama con la cabeza y Scorpia asintió enérgicamente —Es importante que encontremos la fuerza dentro de nosotros mismos para rescatar los momentos que valen la pena en estos... tiempos difíciles —le sonrió de nuevo, sirviendo el té que llevaba, sentada en la cama.

—Sí... No hay que perder el ánimo para poder seguir luchando y rescatando personas —Scorpia se sentó con cuidado en el otro extremo de la cama.

—¿Te gustaría acompañarme a meditar mañana? —le dijo Perfuma con una sonrisa pequeña tras la taza levantada, ya llevándola a sus labios, y mirándola entre pestañas.

—No puedo creer que traer este vestido todo el camino desde la Zona del Terror sirviera para algo después de todo —comentó Scorpia mientras terminaba de alistarse para la misión especial con Mermista.