Ingeniería del corazón ---Adaptación Seulrene--- [TERMINADA]

3

Te dejaré libre, pero por favor...

Conforme los días avanzaban, Seulgi e Irene habían cumplido dos meses de "separación" aunque seguían viviendo en la misma casa, Yeri llegó con bolsas de despensa para la morena que le sonrió agradecida, lo guardo en los estantes y en el frigorífico mientras la morena se sentó en la mesa de la cocina.

- ¿Qué es esto? - Observó unos papeles.

- Oh, la demanda de divorcio que me mando Jeong.

-  i¿Qué?! - Lo tomó - Así que esto es lo que tanto insistía él.

- ¿A qué te refieres? - La observó.

-  No sé mucho al respecto, sólo que ella se negaba a algo, pero él insistía que no podía dejarlo así.

- Ah, es porque le pedí la casa a cambio del divorcio.

- ¿Estás loca?

- Ella aceptó - Se encogió de hombros.

- ¿El auto también? - Yeri leía la demanda - ¿Vas a quitarle todo? - La observó.

- Él puede darle más - Sonrió.

- Espera ¿Qué diablos estás diciendo?

- Si quiere ser libre, tendrá que pagar su libertad para que pueda ser feliz con otro, si le interesa, claro - Bebió su café.

- No te reconozco Bae Irene.

- Es lo que hay ahora - Sonrió.

- En verdad no te reconozco - La observó.

Yeri salió de la casa molesta, había creído estúpidamente que su amiga entraría en razón, pero ahora estaba perdiendo el juicio, por su parte Seulgi observaba su sortija de matrimonio que reposaba en su dedo anular ¿Qué estaba haciendo? ¿Por qué sufría por alguien que no la quería? Que estaba sacando a la luz su verdadero ser, retiró la sortija de su dedo lentamente, para observarla, repasó el grabado "Bae Irene  2023, 13, 07" la tomó entre sus manos apretándola contra su corazón, sería la última vez que lloraría por ella, se prometió, se hizo un ovillo en la cama mientras lloraba sacando todo el dolor que tenía dentro, había prometido que mañana sería una mujer diferente, nueva, distinta, lloró toda la noche y parte de la madrugada, llamó a la oficina diciendo que no iría que se sentía mal, así que tuvo tiempo para mejorar su aspecto cuando Jaehyun llegó para llevarla almorzar.

- ¿Estás bien? - La observó.

- Sí -Asintió.

- Me alegra- Le acarició la mejilla.

Seulgi relajó su expresión para recargar su mejilla contra la palma de Jaehyun que sonrió, era la primera vez que ella se permitía disfrutar de su toque, así que volvió a inclinarse para besarle los labios, el beso era torpe por parte de la castaña que se notaba se esforzaba en disfrutar el beso y corresponderle.

- Sé que es repentino, y osado dado que la última vez no salió bien. 

- ¿A qué te refieres? - Lo observó.

- Hay una cena y me gustaría que fueras conmigo, sin embargo, no puedo prometerte que ella no estará ahí - Expresó preocupado.

- Está bien - Asintió - Puedo con ello - Sonrió.

- ¿Estás segura?

- Te prometo que esta vez no saldré corriendo - Rio.

- Bien, será la semana que sigue y... - Su móvil lo interrumpió - Dame un segundo amor ¿sí? ¡¿Qué?! Es una... Estoy con ella, iremos para allá - Colgó.