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Muzan kibutsuji, un omega estudiante de preparatoria con la edad de 16. Cuyas notas eran extraordinarias, tenia un coeficiente intelectual bastante alto y eso lo debían de admitir los profesores quienes eran nada más y nada menos que los pilares. Al principio al entrar en esa escuela pensaron que iba a ser una gran molestia gracias a lo que paso en su antigua vida con el.

Pero grande fue su sorpresa al ver como este actuó normal, era uno de sus mejores estudiantes, era aplicado y obediente. Sin mencionar su grande coeficiente intelectual; estos llegaron a la conclusión de que aunque suene imposible o un mal chiste... Kibutsuji no recordaba nada de su vida pasada.

Por supuesto estos no creían eso, solo pensaban que estaba fingiendo, todos los cazadores, sus amigos y ellos recordaban su vida pasada y lo que fueron en esta. Era imposible que el mismísimo rey de los demonios no recordará su vida pasada y lo que había sido, junto con sus acciones; era irreal o si quiera creíble, pero era la verdad el no recordaba nada de su antigua vida.

[...] 

Me encontraba saliendo de mi preparatoria, mi día era normal, común y corriente. Mientras caminaba directo a mi casa notaba o sentía miradas de desprecio hacía mi, junto con algunos murmullos diciendo cosas horribles de mi. 

La verdad ya me había acostumbrado a tales acciones por parte de la gente, siempre me pregunto "¿Que fue lo que hice para merecer esto?" y era así; no sabia que fue lo que hice para merecer o ganar tales actos por parte de la gente. 

Minutos después llegué a mi casa, no estaba aliviado o feliz de llegar a mi 'Dulce hogar', ya que, afuera de mi casa ganaba desprecio y odio de la gente pero en mi casa me ganaba el odio y desprecio de mi padre.

¡Bienvenido a casa cariño! ¿como te fue? ─ Hablo una voz femenina y dulce, era la madre de muzan dandole la bienvenida, el quería mucho a su mamá, ella era dulce y amable con el. Nunca se le paso por la cabeza tratarlo mal o si quiera mostrarle odio y desprecio; ella quería mucho a su hijo, pero no podemos decir lo mismo de su padre.

¡A quien demonios le importa como le fue a ese inútil, mejor vuelve a la cocina y termina la cena! ─ grito un hombre alto, su voz sonaba que estaba molesto y enojado apenas llego muzan, estos siempre estaban en constantes discusiones y su madre tenía que intervenir antes de que llegaran a los golpes, no quería ver a su hijo lastimado por la persona que era su padre.

A lo cual la mujer fue a la cocina gracias al anterior grito de su marido pero con la mirada le dijo a muzan que fuera a la cocina y así podrían hablar tranquilamente; ya que su familia era una de las más conocidas y millonarias de su país, por lo cual su casa era una mansión, demasiado grande para las tres personas que vivían ahí. Por lo cual al ir a la cocina su padre no podría escuchar su conversación o gritarles.

୧⋆。🕯.Tu solo buscas atención  -ʚɞDonde viven las historias. Descúbrelo ahora