🆆🅽🅶: Universo canon, sexo oral, sexo sin protección, romanticismo, soft
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Estaban entrenando, a la chica le gustaba mucho Yuji, en todos los sentidos; Como compañero, hechicero, hombre y novio, aunque al inicio había sido problemático por un gusanito llamado "Ryomen Sukuna" habían aprendido a manejarlo.
Ahora mismo estaban en un combate de cuerpo a cuerpo.
— (___) después de esto ¿Quieres ir por un helado?
Preguntó a lo que la chica lanzó una patada siendo esquivada por el pelirosa el cual tomó su otra pierna tirándola al suelo.
— ¡Duele! – Se quejó la joven y aprovecho para dar una vuelta hacia atrás, llevando una mano a su espalda, donde había un pequeño bolsito del cual sacó varios cuchillos pequeños — Sabes que sí, amor ¿Con papas?
La chica comenzó a lanzar los cuchillos que su pareja comenzó a romper o esquivar, cuando lanzó los suficientes, corrió en su dirección le dió un golpe en el pecho, haciéndolo retroceder, entonces aprovechó a patear su costado, logrando que el chico se doblará, le dió otra patada que lo tiró al suelo, entonces la mujer se acomodó sobre él, con un cuchillo cerca del cuello del joven.
— Gané – Sonrió la chica con su novio abultando sus labios en un tierno puchero.
Entonces este empezó a hacerle cosquillas a los costados, logrando quitarle su arma para llenar de besos el rostro de su novia.
— Bueno, ahora gané yo – La chica le intentó dar golpecitos en la espalda del joven pero terminó cediendo a los besos del pelirosa, sintiendo cómo las manos del chico se colaban por su falda.
— Espera, espera ¿Quieres hacer eso aquí? – Murmuró bajito la chica mientras su novio bajaba los besos a su cuello, bueno ahí su respuesta.
No se iba a quejar, le encantaba la idea.
Sintió como el chico bajaba el cierre de su falda, deslizandola, la joven suspiró y cuando iba atraer a su novio para besarlo, pero no logró su objetivo por la voz de su novio.
— Espera... – Dijo suave y se levantó cargando en un brazo a su pareja, la cual siento su rostro rojo, solo tenía puesta su camisa así que era un poco extraño, echó el suéter de la chica al suelo, el pelirosa se quitó el propio y también lo puso en el suelo, dejando a la vista su excelente abdomen — Debe estar frío, así que esto debería ayudar
Dijo haciendo sonreír a la chica por lo dulce que era su novio.
— Te amo mucho – Dijo para besarlo mientras nuevamente era recostada, su camisa siendo desabotonada con delicadeza.
— Eres tan hermosa... ¿Qué hago? Quiero tenerte solo para mí
La voz de Itadori hizo cosquillas en la chica, riendo para acariciar su rostro, levantando un poco su cuerpo para que le quitará la camisa y sostén.
— Soy solo para ti, pero también eres mío, así que estamos a mano
Mencionó la mujer mientras las manos de su novio comenzaban a acariciar sus pechos, haciendo que soltará suaves gemidos, la chica aprovechó para alzar un poco su pierna, frotando suavemente su rodilla en la entrepierna despierta de su novio.
— Tramposa... Yo siendo dulce y tierno pero si tan ansiosa estás quizá pueda ser un poco más rudo, linda
Sonrió para acariciar suavemente los labios vaginales de la chica, haciendo que la joven mordiera su labio inferior.
— Tú puedes ser como quieras – Dijo con una sonrisa la chica para besar sus labios con calma sintiendo sus piernas temblar ante los toques de su pareja, el cual bajó el rostro lentamente a sus muslos, empezando a besar los mismos, llegando a la intimidad de la chica.
— Entonces espero que estés preparada, dulzura
Sonrió para ingresar su lengua en la vagina de su novia, con ella bajando su mano para tomar los cabellos rosados de Yuji, jadeando por los hábiles movimientos que hacían su interior lubricar, mojando los labios del chico, el cual no estaba mejor, sintiendo su pantalón apretar su zona pélvica.
El cuerpo de la joven tenía suaves convulsiones de placer, sintiendo su piel erizarse por la atención a la zona más sensible de su cuerpo.
— Espera... Yu... Cariño – Los muslos de la chica apretaron con suavidad el rostro de su amado el cual no podía ser más feliz.
Su lengua dejó de ser la protagonista para hacer pequeñas succiones en los labios de la joven la cual arqueó su espalda, negando mientras lloraba, el placer era indescriptible y su cuerpo lo aceptaba muy bien.
El chico no perdió tiempo y guio un dedo al Interior de su pareja, empezando suaves embestidas, sintiendo como la lubricación de su chica lo mojaba, estaba desesperado, pero amaba saber que ella se lo pasaba increíble.
Soltó un pequeño y grave gemido al separarse de la intimidad de su novia, relamiéndose los labios con una sonrisa altanera.
— Será mejor que estés preparada, porque no pienso detenerme aunque lo pidas
La chica sonrió entre jadeos, asintiendo, dejando que su novio la acomodará a su gusto, en este caso, en cuatro, con su trasero bien en alto y su pecho pegado al suelo con la chamarra de su novio siendo la protección perfecta contra la fría madera, además que le fascinaba el aroma de Itadori.
— Qué vista más... Me vuelves loco
Los labios húmedos del chico empezaron a dejar suaves besos en la arqueada espalda de la chica la cual soltaba suspiros, su Yuji no podía ser más cuidadoso y perfecto.
Aunque no pensó lo mismo cuando sintió la erección caliente de su pareja expandir su interior de golpe, haciéndola gemir en alto, rasguñando suavemente la madera debajo de ella.
— ¡Yuji! Eres un... – Las fuertes embestidas de su novio la interrumpieron mientras el sucio sonido de sus pieles chocando hacía eco en esa sala de entrenamiento.
— Eres tan preciosa, no pude evitarlo, cariño... te necesito tanto, tu interior me abraza con tanta fuerza... Te amo
Bien, eso la hizo suspirar, sintiendo las caricias en su espalda, con la erección del pelirosa llenando su interior con un ritmo rápido, a pesar de la velocidad no era brusco, era el equilibrio perfecto para que ambos disfrutarán.
— Te amo más... Yuji...
Logró murmurar sintiendo como su cuerpo era empujado, por las embestidas, entonces las manos del chico fueron a los pechos de la joven, apretandolas y haciéndola erguirse, ahora estaban ambos de rodillas, con la espalda de la joven pegada al pecho del contrario.
— Me estoy volviendo loco... Quiero tomar todo de ti
Los dedos del chico empezaron a frotar los pezones de la joven poniéndolos erectos, con las embestidas volviéndose más profundas y rudas por haber cambiado de posición.
Pero pudieron verse al rostro, entonces empezando un beso lento y sensual, una de las manos de la chica fue a la mejilla del contrario disfrutando el beso con la otra aferrándose a la cadera del chico.
Itadori llevó los besos al cuello de la chica, haciendo succiones y dejando marcas.
— Preciosa... No voy a... aguantar más...
La chica solo asintió, moviendo más su cadera a su encuentro con la pelvis de su novio, esto hasta que esté aplicó solo un poco de su inhumana fuerza para detener los movimientos y llenar el interior de su amada.
— Mierda... Lo hiciste dentro... Tienes suerte de que te ame mucho
Murmuró mientras volvía a compartir un beso con su novio, ya se preocuparía más tarde de ir por una pastilla.
