lujuria //aunete//

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Su bella piel morena brillaba a contraste con la luz del sol, y sus trenzas se movían en conjunto a cada paso que daba con un toque de elegancia, cayendo en forma de cascada por su espalda.

A paso veloz se adentro en la comisaría, con la cara neutra y los ojos ardiendo en enojó dijo:

- donde esta "Lo'ak sully"- el policía que lo atendió tecleo rápidamente

-segunda puerta del pasillo de la izquierda- y con eso desapareció haciendo resonar sus pisadas por el pasillo antes dicho.

Entro en aquella habitación encontrándose con varios muchachos no mayores de 16 años, entre ellos Lo'ak.

-¡Lo'ak sully!- dijo con enojó el muchacho, acercándose a los barrotes que mantenían encerrado a su dolor de cabeza andante.

-mierda..- murmuro el antes mencionado, ocultándose detrás de algunos de sus "amigos"

-¡si te vi!,¡Rata sucia!- neteyam no solo estaba molesto, si no que estaba a poco de arrancarle los ojos a su hermano.

Unas pisadas lentas y el tintineo de una llave resonó en el umbral de la puerta, ya sabia quien era, y eso le jodia aun más.

-¡valla!,¡que milagro verte por tercera vez en la semana sully!- el tono de burla con el que lo decía era aun mas jodido y lo llenaba de mas enojo.

-cállate Ao'nung, y hagamos rapido esta mierda- rodando los ojos se dirigió al escritorio que allí había.

-as venido tantas veces que creo que ya sabes que hacer- dijo el de ojos azules, mirando con burla al de piel morena.

-aja- dijo empezando a firmar  unos papeles, mientras Ao'nung sacaba a su "queridisimo" hermano de la celda.

-Ao'nung, ¡viejo amigoo! Creo que podríamos haber solucionado esto sin llamar a neteyam- dijo ya nervioso

El mencionado solo rodó los ojos y negó lentamente .

-no e olvidado lo de mi hermana, sully- solto con molestia, ¿como era posible que su hermosa, inteligente, responsable y dulce hermanita se fijara en alguien que es todo lo contrario?¡no tenia logica para ao'nung!

-ya esta.- se escucho de parte del moreno de ojos bonitos y figura esbelta, y sus pisadas fuertes resonaron hasta llegar donde su hermano, tomando su oreja.

-¡oye!,¡neteyam!,¡sueltame!- grito Lo'ak, mas la mirada penetrante de su hermano  lo hizo cerrar la boca.

-no quiero escuchar NI UNA sola palabra TUYA- dijo y empezó a caminar jaloneando las orejas de hermano, quien sin argumentos solo se dejaba hacer.

Los policías del lugar miraban la escena sin intervenir, entendían los motivos de la molestia del moreno.