Solo Tuya | Jenlisa

03

Lisa regresa al baño con una ropa para Jennie. Solo que no es algo de ropa interior, una camiseta de Lisa y unos shorts de rose, pero son suficientes para que deje de estar mojada. Al entrar la encuentra revisando los moretones del rostro y siente culpa por haberlos provocado. No deja que Jennie lo note y se límita a apoyar la ropa en el lavado.

— Puedes cambiarte aquí — Jennie toma toda la ropa y la pelinegra sale cerrando la puerta detrás de ella.

Intenta quitarse el vestido pero no puede bajar el cierre así que con algo de duda decide buscar a Lisa para que la ayude. Abre la puerta y se arrepiente de inmediato, la pelinegra estaba desnuda, cambiándose y estaba segura de que vio que tenía un miembro reproductor masculino. Aunque Lisa se haya cubierto rápido, ella lo vio y se quedó dura, no podía moverse y la mirada de odio que le dedicaba la pelinegra lo empeoraba todo.

— ¿No puedes hacer nada bien? ¡¿porque Diablos abríste la puerta!? — Nuevamente se encontraba gritado y Jennie seguía sin poder moverse — ¿Eres idiota? Responde.... — Camino hacia ella y fue cuando Jennie se dio cuenta de que había algo roto dentro de Lisa — ¡Responde! — No grita pero están autoritaria que hace que Jennie de un pequeño brinco.

— El cierre esta atorado y no podía bajarlo — dice cubriendose el rostro con los brazos — solo quería que me ayudaras — el estómago de Lisa se remueve al ver que Jennie tiene miedo de que la golpee, solo una vez lo hizo intencionalmente pero sabia que Jennie no lo veía así.

— Te ayudaré — Dice más calmada y Roja por que an visto una parte de ella que detesta — Lo que viste... Yo... — suspira por que no sabe cómo continuar y tampoco sabe porque quiere darle una explicación.

— Esta bien, solo ayudame con el vestido — pide para tranquilidad de Lisa

Jennie se voltea y Lisa ajusta su tobillo para poder usar las dos manos al abrir el vestido. Mientras el zip pero del vestido de deslisa, la piel de la castaña comienza a aparecer. Lisa traga duro mientras continua bajando hasta la espalda baja, su cuerpo, comienza su reaccionar y tiene impulso que intenta obligarla a caer en algo que no quiere.

Retrocede y vuelve a tomar la toalla para dicimular su semi erección que tiene. Jennie voltea mientras sostiene el vestido que esta flojo en ciertos lugares. Todo se vuelve más complicado para Lisa así que desvia la mirada e intenta parecer imperturbable.

— Gracias — escucha antes de que la puerta vuelva a cerrarse con Jennie dentro.

Voltea a ver su ropa y rápidamente la toma para cambiarse antes de que Jennie salga del baño. Disimula la erección de su cuerpo con una sudadera grande. No sabe que hacer y tocarse tampoco es una opción. Para cuando Jennie sale se siente un poco menos insegura pero cuando se acerca a ella nuevamente, le resulta imposible no ver lo mucho que la ha lastimando en el rostro.

—  Lo siento, no queria hacerte daño — insiste, pero Jennie solo asiente sin decir nada — No intentaba golpearte, no puedo controlarme — intenta comenzar a explicar su posición pero no puede terminar.

— ¿Por que no?.... No puedo creerte — Dice de modo prepotente la Morena, esta lista para otra batalla y no le importa que la vuelvan a golpear — me tienes secuestrada y cada vez que algo te molesta  me agredes — levanta el tono de su voz  — Te odio y quiero irme de aquí — suspira bajando la voz, no puede soportar más la presión y comienza a llorar.

— No te dejaré ir así que mejor acostumbrate a estar aquí — Lisa se acuesta en la cama mientras la observa llorar.

No la acepta mucho pero le gustaria que no lo hiciera. Se limita a observarla  usando su ropa. Es muy bella, muy sexy y sin saber que si no detiene todo sería peor para ella, dejar que una mujer la atrape es muy tonto, Aunque ninguna mujer jamás te había interesado del modo en el que lo hizo la morena.