Narrador: La muerte súbita es un misterio para todos. Lo único que todo el mundo tiene claro, es que una vez que te llamen, no te queda mucho tiempo.
Este relato nos cuenta ¿qué pasaría si al final no muriera ninguno?
Mateo (0:22)
Teléfono de Mateo: Hola, te llamamos de muerte súbita, mi nombre es Andrea. Mateo, siento informarte que en algún momento de las próximas veinticuatro horas vas a sufrir una muerte prematura…
Rufus (1:05)
Teléfono de Rufus: Hola, soy Victor, de muerte súbita. Llamo para hablar con Rufus Emeterio. Rufus, siento informarte que en el transcurso de las próximas veinticuatro horas vas a morir de forma prematura.
Narrador: Pero eso ya lo sabes…
Después del incidente con la pistola, Rufus y Mateo salieron corriendo y se refugiaron en el departamento de Mateo, hasta que sonó la puerta, y Mateo, temeroso decide ser el quien atienda a ese llamado.
Lidia: ¡Mateo! Me alegro tanto de que estés bien, después de que salieran corriendo me quedé muy preocupada.
Mateo: ¡Lidia! Que alivio, creí que eras un asesino. Lamento mucho haberme ido así. Pero la situación lo requería totalmente.
Lidia: Entiendo, no te disculpes, lo bueno es que estás bien.
Mateo: Estamos, Rufus también sigue aquí.
Rufus: Hola Lidia, que gusto verte.
Lidia: Pero que alivio que ambos estén bien. Me quedaré con ustedes hasta que…bueno, saben a lo que me refiero.
Mateo: No tienes porque Lidia. No quiero que tengas que presenciar nuestras muertes, no tengo ni idea de que tan traumático podría ser eso.
Rufus: Si, ve con tu hija Penny, ella te necesita más que nosotros
Lidia: Ya lo he decidido, me quedaré con ustedes. ¿Por qué no hacemos un maratón de películas?
Mateo: ¡Me encantaría!
Rufus: Si, no tiene nada de peligroso
Narrador: Y así pasaron los minutos, los cuales se volvieron horas y al menos por un rato, los tres se olvidaron de lo que creían inevitable.
6 de septiembre (00:15)
Narrador: Estaban muy concentrados viendo la película, hasta que Rufus (al cual ya comenzaba a aburrirle lo que veían) se percató de la hora
Rufus: Chicos, ¡ya son pasadas las 12!
Mateo: ¿Y ahora? ¿Seguimos vivos?
Rufus: ¡Mateo, nos salvamos!
Mateo: ¡No lo puedo creer!
Rufus: ¿Qué pasa Lidia?
Mateo: Si, no te noto muy convencida
Lidia: Eso es porque no lo estoy, nada de esto me cuadra. No es por ser grosera o pesimista, pero no deberían de seguir vivos.
Mateo: Pero lo estamos, y estaremos bien, mejor tu ve a cuidar de Penny
Lidia: Está bien. Adiós, los quiero.
Mateo: Rufus, ¿estás seguro de que estaremos bien?
Rufus: 100% seguro
Mateo: En ese caso, seríamos los primeros en sobrevivir a la llamada de la muerte súbita.
Rufus: No “seríamos”, ya lo somos Mateo. Aún no tengo claro el cómo o porque, pero si estoy seguro de que el destino nos quiere ver juntos y por eso nos dio una segunda oportunidad, una segunda oportunidad para hacer las cosas correctas esta vez.
Narrador: Y así fue como Mateo Torrez y Rufus Emeterio agregaron una interrogante más al misterio de la muerte Súbita, las personas detrás de ella, y todo lo que esto conlleva y por alguna razón se mantiene como un gran secreto.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
