Ángel Caído

29 1 0
                                    


 Algo no se encuentra del todo bien, esta mañana que desperté entre mis sabanas de satín pude sentir un sentimiento de vacío y dolor, no entiendo qué me sucede, así que inicio mi rutina de cada mañana. Limpio mi rostro con delicadeza y me aseo como de costumbre, pero la verdad es que desearía poder seguir durmiendo y soñando, solo hasta el medio día, para que mi vida se pueda resumir en un buen libro de amor, una tarde con deliciosos pastelitos, té y miel. Muy dentro de mí desearía un amor liberal, que llegara a la puerta de mi casa invitándome, como todo un caballero, a permanecer en su vida eternamente, con un anillo de compromiso. Como desearía ser un ángel con alas suaves y blancas para así volar hasta el cielo y poder tocar las nubes donde quisiera permanecer con un amor

Isabel White es la más hermosa entre todas las chicas de la ciudad, su belleza deslumbra desde que despierta cada mañana cuando el sol entra por la ventana y toca su rostro. Dulce mirada de ángel soñador que enamora a cualquier ser humano.

Empezamos en agosto, un sábado agitado en la noche, asiste con su familia a una gran fiesta de sociedad, entrando al salón todos alrededor la notan y hablan de que parece un ángel con una belleza extraordinaria, Isabel ignora por completo lo hermosa que es. La mayoría de chicos atónitos ante su gracia desean poder pasar la noche bailando junto a ella. Richard, un hombre de 35 años, era un hombre grotesco y desagradable que solo deseaba e imaginaba tener el cuerpo de Isabel, a raíz de eso tiene los más sucios y pervertidos pensamientos.

Isabel tiene la necesidad ir al baño, así que sube al piso de arriba, un pasillo solitario donde al fondo estaba la puerta de baño, pero Richard estaba cerca esperando el momento perfecto donde ella estaría sola para poder atacarla. Cuando Isabel entra al baño, Richard entra y cierra la puerta muy rápido, ella asustada lo confronta

— Lo siento, usted está confundido, este baño es de mujeres — Dijo Isabel

— Lo sé, es perfecto y ahora más porque tú estás aquí — Respondió Richard

Richard acorrala contra la pared a Isabel manoseándola, luego le tapa la boca con mucha fuerza, con su peso tumba a Isabel al piso y desde aquí empieza a meter su mano debajo de su falda, con fuerza y desespero ella lucha para que la suelte y librarse del monstruo que está por extinguir la luz celestial sobre Isabel, sucede lo más cobarde que un hombre le puede hacer a una mujer indefensa en esas circunstancias, su lucha fue en vano, el dolor, la sangre de su virginidad era aterrador para ella y su cuerpo, lloraba con agonía, se retorcía del dolor que sentía, pero Richard tapó la boca de Isabel con su mano, le faltó el aire y se desmayó, sufriendo las consecuencias de un acto tan despiadado y asqueroso.

Isabel estaba desmayada en el piso del baño, pero era buscada desesperadamente por su familia. Suben al piso de arriba para buscarla y lamentablemente la encuentran tirada con sangre, lágrimas y una inocencia destrozada, en donde su cuerpo no respondía por el shock, las heridas y por casi asfixiarse.

Sus padres la llevan a casa para tratarla, la cubren con una sabana y la llevan en brazos, pero ella no lograba despertar del todo, así que solo tiene recuerdos borrosos en donde la culpan por tentar a los hombres con su belleza y ser la vergüenza en una fiesta de sociedad. Ella no entendía qué estaba sucediendo, así que durmió hasta el siguiente día, día en donde nuestro ángel ya no existe, su pureza y amor se extinguió. 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 10, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Mujer FatalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora