Purinz (chaewon x yunjin)

896 30 0
                                    

— dios mio, siento que voy a morir - reí ante el comentario de sakura, quien suspiro y se lanzó sobre la cama.

— claro hasta yo, un poco más y te bebías el agua de los floreros sakura - se burló kazuha.

Se giro en su lugar en la cama, al sentir como esta se hundía por el peso de alguien sobre ella, sonrió al encontrarse de frente con los ojos marrón oscuro de chaewon delante de ella, la chica sonrío también al ver como trataba de mantener los ojos abiertos, sintiéndose levemente consumida por el sueño, y como los efectos del alcohol la adormecían un poco más.

— fue la mejor fiesta del mundo - sakura se lanzó en el colchón, justo en medio de ambas, logrando aplastarlas un poco, yunjin y chaewon soltaron fuertes quejidos y a la vez comenzaban a empujarla.

Luego de una noche de fiesta bastante loca, por el cumpleaños de sakura, y aprovechando que sus padres estaban de viaje, todas habian quedado más que destruidas, por suerte habian decidido quedarse y hacer una pijamada entre todas en el lugar, lo que no imaginaron era que terminarían en tal estado, yunjin abrió los ojos luego de unos minutos, y pudo notar como la mayoria de tus amigas se encontraban tiradas en la sala, algunas en colchones, otras en el piso, y algunas en el sofá, rio al ver como kazuha tenía su pie sobre la cara de sakura, y ambas estaban en el piso.

Se levantó de su lugar, observó a chaewon mientras ataba los cordones de sus zapatillas, suspiró al verla dormir pacíficamente en su lugar, luciendo particularmente encantadora, y se encontró preguntándose a sí misma, ¿cómo es que podía lucir tan bien incluso cuándo estaba dormida?

Estaría mintiendo si dijera que jamás había pensado en chaewon de otra forma más que una amiga, varias veces se había encontrado a si misma perdida en sus ojos, o demasiado enfocada en la forma en que reía, le gustaba, estaba muy segura, sobre todo porque sentía que cuando estaban juntas, todo era posible, porque era su lugar, ellas hacían las reglas, no podían decir exactamente cuándo empezo su atracción hacía chaewon, aunque sus amigas insistían en que desde la primera vez que sus ojos se encontraron ambas habían quedado flechadas por la otra.

— mierda - susurro al casi tropezar contra una mesa de la sala.

Agradeció tener una chaqueta sobre sus hombros en ese momento, puesto que hacía algo de frío, sin embargo, aquello no evito que see acostara en una de las hamacas que se encontraban en el lugar, tarareaba una canción de taylor swift, comenzando a sentirse relajada y un poco adormilada, poco a poco sus ojos se fueron cerrando hasta volver a quedarse dormida. Chaewon, quien se encontraba en el colchón en la sala, se levantó de su lugar casi de inmediato en el momento en que sintió que yunjin salio del lugar, sus ojos la siguieron hasta la hamaca, se quedó recostada en la encimera de la cocina, debatiendo consigo misma si debía o no hacer lo que tenía planeando desde hace unos días.

— a la mierda, lo haré - susurro dejando el vaso de agua que estaba sobre su mano, camino hasta el jardín totalmente decidida, no fue hasta que la vio dormir pacíficamente en aquella hamaca, se detuvo, por primera vez y analizó lo que estaba a punto de hacer, sin embargo, aquello no la detuvo, todo lo contrario, fue un impulso más para sí misma.

Con total cuidado, se sentó junto a yunjin, sonriendo al verla dormir ahí con una media sonrisa y los ojos cerrados, soltando uno que otro suspiro de sus labios, tomo un poco de aire y antes de hablar humedeció sus labios un poco, sintiéndose repentinamente nerviosa.

— dios, esto es tan estúpido, yunjin - se río levemente de sí misma, pensando en lo patética que lucía - jamás encontre la forma o el momento indicado para decirte esto, pero... desde la primera vez nos vimos, tenías una especie de neblina deslumbrante, algo misterioso en ti, hablamos, y me pregunté, ¿nos hemos conocido por veinte segundos o veinte años?, cuando comenzamos a hacernos amigas, y sé que esto sonara horrible, solo me preguntaba, ¿puedo ir a donde vayas? ¿podemos estar siempre así de cerca? - sonrió - podemos dejar que nuestras amigas duerman en la sala de estar, porque realmente me siento bien cuando estoy contigo, lo juro, antes pensaba que era sospechoso que todos te quisieran, que todos te adoraran, pero ahora que he estado tres veranos enteros amándote, lo entiendo, porque te amo, yunjin, enserio lo hago.

Suspiró mirando hacía el frente, por lo que no se dio cuenta de que la antes nombrada se encontraba con los ojos abiertos mirándola directamente, así como tampoco se dio cuenta de que durante el tiempo que estuvo hablando, no estuvo dormida.

— yo también te amo, chaewon - susurró, encontrando valor para hablar, ella se giró sorprendida y la miro a los ojos, sintiéndose sumamente nerviosa.

No podía creer que yunjin habia escuchado toda su confesión llena de cursilerías, sin embargo, el pensamiento desapareció en cuanto los labios de la menor se encontraron con los suyos, en un beso lleno de amor y algo de nervios.

Al final del día, ambas sentían que estaban donde debían, su corazón había estado prestado y el de ella triste, pero estaba bien, porque gracias a eso, acabaron junto a la otra.

— prometo guardar mis mejores bromas para ti - susurró yunjin justo antes de besar la mejilla de chaewon, por lo que sonrió casi de inmediato.

— pues yo te guardare un lugar a mi lado en cada mesa - contestó chaewon.

Le Sserafim Ships • One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora