CAPÍTULO 1

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Siempre he sido una persona bastante estudiosa y nunca dejo las tareas para el último momento ni estudio un día antes para un examen. Ahora me encuentro en mi habitación estudiando para el examen de química que tengo mañana. Estoy en primero de bachillerato, así que tengo 15 años. Los 16 los hago dentro de 1 mes, para ser exactos, el 18 de noviembre.

Me llamo Elena García, pero la gente con la que tengo confianza me suele llamar Lena. Cuando me saque el bachillerato, quiero hacer el grado superior de estética. Al principio quería ir a la universidad como mi hermano, pero no estaba muy motivada, así que puede que vaya cuando ya tenga un trabajo estable y cobre bien para no seguir dependiendo de mis padres y poder pagar yo misma mis cosas.

Me encuentro sola en casa, ya que mis padres están trabajando. Mi madre es organizadora de bodas, ahora está organizando la boda de una pareja que llevan saliendo 8 años. Mi padre trabaja de cirujano en el hospital de la ciudad dónde vivimos, Madrid.

También tengo un hermano mayor, él tiene 18 años. Se llama Alberto. No vive con nosotros, ya que se pidió una beca para estudiar en una universidad fuera del país.

Mis abuelos de parte de padre murieron hace ya unos 4 años, y los de parte de mi madre... no nos llevamos muy bien. Mi madre nunca me quiso explicar la historia de porque se distanciaron.

No tengo novio ni nada, con el primer y último chico con el que estuve, me puso los cuernos con una amiga mía. Bueno, ex amiga, le dejé de hablar y a día de hoy me sigue buscando, ya que mi ex le puso los cuernos. Realmente ya me lo esperaba.

Tengo una mejor amiga, se llama Marta. Las 2 estamos haciendo el bachillerato de ciencias. Nos conocemos desde que éramos pequeñas. Me acuerdo de que cuando íbamos a primaria quedábamos todas las tardes en su casa o en la mía. Ella tiene un hermano mayor, Marcos. Él es técnico sanitario.

Como ya dije anteriormente, estoy estudiando para el examen de química. Estoy haciendo esquemas para poder estudiar mejor y para que se me quede en la cabeza. Cuando de repente suena el timbre. Se me hizo extraño porque aunque fueran las 18:30 de la tarde, no esperaba la visita de nadie. Me acerqué a la puerta, pero antes de abrir miré por la mirilla y era Marta con 2 maletas y unas bolsas de plástico enormes. Se le veía estresada, triste y enfadada. Le abrí la puerta y entró mientras empezaba a hablar. Me acerqué a ella y pude ver que estaba a punto de llorar. Se lanzó a abrazarme y rompió a llorar.

Pasaron unos minutos y las 2 nos encontrábamos sentadas en mi cama. Ya no lloraba, pero no le salían las palabras para contarme lo que le pasaba, así que le di tiempo para que esté mejor.

-¿Estás mejor?-le pregunté.

-Un poco sí... pero me duele mucho lo que ha pasado, o sea, te juro que no me lo creo. No me lo esperaba para nada viniendo de ellos.

-¿Quieres explicarme?

-Sí... Mis padres me echaron de casa al descubrir unas fotos que tenía guardadas de mi exnovia. Se enteraron de que era bisexual y me echaron de casa...

-¿¿Cómo?? No puede ser...

-Yo tampoco me lo creía, ellos siempre me decían que me apoyarían en todo y resulta que no es verdad.

-¿Y sabes dónde quedarte? Le puedo preguntar a mis padres si te puedes quedar con nosotros.

-No te preocupes, le envié un mensaje a mi hermano a ver si me puedo quedar con él, pero de momento no me ha contestado.

La volví a abrazar porque me estaba doliendo mucho lo que me dijo. Hace muchos años que conozco a sus padres y nunca me esperé que le hiciesen eso a su propia hija.

Ya eran las 20:00. Estuvimos estudiando cuando le llegó un mensaje de su hermano.

-Tía, ¿qué te ha dicho?

-Me dice que sí que puedo quedarme con él, pero no llegaría a casa hasta mañana por la tarde. ¿Me puedo quedar aquí esta noche?

-Sí, claro. Ahora llamo a mi madre y se lo digo.

-¡Muchísimas gracias...!

Nos encontrábamos cenando los 4 en la mesa del comedor. Resulta que la boda que estaba organizando mi madre se ha cancelado. Se ve que la mujer le fue infiel, pobre hombre.

Acabamos de salir del instituto. La verdad es que el examen me fue bastante bien, creo que voy a aprobar. Marta y yo estábamos de camino a casa. Hoy se iba a mudar a casa de su hermano, así que teníamos que pasar por mi casa a buscar sus cosas, pero antes íbamos a comer.
Como mis padres no vuelven hasta la noche, casi siempre cocinaba yo mi comida o la pedía. Hoy cociné pasta carbonara para las 2. Cuando terminamos de comer, descansamos un rato y fuimos andando hasta la casa de Marcos.
Marcos nos abrió la puerta. Resulta que en su casa habían 2 pisos, y nos enteramos de que no vive solo, vive con su novia. Nos ayudó a subir las cosas de Marta al piso de arriba. Cuando llegamos a su nueva habitación, solo había una cama de matrimonio sin fundas ni nada. La habitación tenía las paredes completamente blancas. De repente a Marta le llegó un mensaje.
-¿Quién es?-pregunté.
-Mi madre... dice que puedo pasar por casa a buscar las cosas que no pude llevarme ayer. Y que cuando no quede nada mío, que no quiere verme más. Dice que espera que me vaya mal en todo lo que haga.-al decir lo último, se le quebró la voz y se le empezaron a saltar lágrimas.
La volví a abrazar. No me podía creer todo lo que le estaba pasando solo por ser bisexual...

Vaciamos las maletas con toda la ropa que había y las bolsas con algunas de sus cosas, libros, maquillaje y un poco más de ropa. Marcos nos acompañó con su coche con varias cajas y bolsas para seguir metiendo sus pertenencias. Sus padres no se encontraban en casa, sabía que habían salido para no encontrarse con Marta, así que aprovechamos para empacarlo todo e ir subiéndolo al coche. No habían muchas cosas, ya que ayer se llevó bastantes cosas, así que no nos cansamos mucho. En varias ocasiones vi a Marta con ganas de llorar, la entiendo, no se merece todo lo que le está pasando.
Marcos y Marta me acompañaron a casa. Como hoy era viernes, Marta y yo íbamos a salir de fiesta. Ella me lo pidió para poder despejar su cabeza, y yo no iba a negarme. También invitamos a ir con nosotras otras amigas de clase, que al enterarse de todo lo sucedido, no iban a decir que no a la salida.

Ya eran las 22:00, ya había cenado. Me empecé a arreglar, ya que las chicas iban a pasar por mí a las 22:30. Resulta que una de las amigas de clase, concretamente Natalia, más conocida como Nati, invitó a una amiga suya que es mayor de edad y tiene carnet de conducir, eso significa que no hace falta ir andando.
A las 22:36 tocaron el timbre y me llegó un mensaje de que estaban abajo esperándome. Me despedí de mis padres, cogí mi bolso con la documentación, dinero y las llaves y me fui. Estábamos a 19 de octubre, pero realmente no hace frío. Iba con jeans anchos negros con agujeros y un top sin mangas blanco. Subí al coche y nos dirigimos a casa de Marcos para buscar a su hermana.

Habían pasado unas 3 horas desde que llegamos a la discoteca, estuvimos bailando durante mucho tiempo seguido y ya no notaba ni las piernas. Me fui a sentar cuando me choqué con un chico. Le iba a pedir disculpas, pero él se adelantó y se fue. Vi que estaba preocupado y como estaba buscando a alguien. Iba a acercarme para preguntarle que le preocupaba, pero choqué con Marta. Sí, hoy me choco con todo el mundo. Marta me dijo que me estaba buscando para irnos, que todas las demás ya estaban fuera buscando el coche. Salimos y la amiga de Nati, que no bebió alcohol, nos acompañó a casa.

UNOS MESES SIN TIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora