Entrada 1.

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Cuando era niña adoraba escribir en mi diario. El primero llegó cuando tenía ocho años y fue un regalo de mi hermana mayor.

Mantuve el hábito de escribir por tanto tiempo que desde entonces junté cuatro diarios.

Odio leer el primero. No entiendo lo que escribía ni lo que me proponía con lo que escribía. A veces no entiendo de donde sacaba esos pensamientos tan raros.

Pero detesto aún más el segundo. Me creía ya una señora inteligente y conocedora del mundo cuando apenas tenía once años. Escribía sobre como mi futuro sería impecable y sería la gran dama de sociedad, con exquisito gusto en ropa y un trabajo que solo yo pudiera realizar. Mis habilidades serían envidiadas y admiradas por partes iguales. La empresa rogaría por mí y no al revés.

Además de eso, de lo único que hablaba era de los niños que me gustaban. Y me gustaron tantos. Hace dos años aún recordaba bien cuantos eran, pero ahora me cuesta mucho recordar la cantidad.

El tercer diario fue el de mis inseguridades. Escribía sobre lo lamentable que era y lo triste que sería mi vida, sobre como acabaría fallando, de que mi hermana se había ido y se olvido de mí. Fue muy adolescente.

El último fue el de una chica enamorada y luego rota en dos.

Estaba enamorada sin ser correspondida y por tres años llene las hojas de como me había hablado, que me había dicho y que cosa tan extrañamente adorabale había hecho para hacerme suspirar.

En realidad solo fueron dos años. En el tercero cambié mi diario por unos correos con un final tan desgraciado que tuve que cerrar mi cuenta y gracias a los cuales hora vivo en la ciudad sin volver a mi casa.

Luego, lo que escribí en mi diario fueron largas entradas de lo mucho que quería verlo, de lo mucho que no quería verlo y a veces de lo mucho que quería que el me viera sin que yo lo viera.

Cuando me di cuenta de que estaba llenando esa hojas de odio y veneno, decidí terminarlo. Me di un espacio. Y ahora he vuelto.

He comprado esta nueva libreta de pasta dura con forro tipo piel que tiene el mapa de Nevarro en relieve y atrás dice: "World is just an island".

Es claro que es un elemento más para turistas, pero estaba en una buena promoción y me gustó.

Y no tengo dinero para gastar.

Así que con esta entrada quiero dar por iniciado este diario. Darte la bienvenida a ti y espero que me acompañes a esta nueva época de mi vida. No te prometo que no habrá drama ni que de vez en cuando hablaré de mi primer amor. Pero sí te prometo que te llenaré con las cosas que me hagan feliz.

Beth Z.

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¡Hola!
Antes que nada hablemos de horarios de publicación. Sera dos veces por semana (lo más seguro es que sea lunes y jueves). Se mantiene el formato de historia corta, pero espero que los capítulos sean más largos que en la primera parte.
Por último, esta es una continuación de mi anterior novela publicada aquí. No es necesario leerla para entender esta.
Y por último, gracias. Tanto si eres nuevo aquí como si leíste mi primer obra, gracias por iniciar esta nueva aventura.

Porque no me gustasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora