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HyunMinLix
Smut +18
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— Lixie podrías venir aquí— le ordeno con una sonrisa amplia y tranquila y cuando observo las peluditas orejitas de aquel pequeño levantarse ante su llamado solo sonrió aun mas, el felino quien de inmediato se había acercado a el curiosamente esperando que dijera algo nuevamente, pero el no quería decir algo cuando lo único que quería era que el rubio de orejitas peludas estuviera con el, al ver las cercanía que había entre ellos, sin dudarlo tomo de su pequeña cintura para jalarlo y hacerlo sentarse en su regazo, observando aquellos hermoso ojitos azules que tanto los llamaban y amaba.
— ¿Minho hyung?...— el pequeño solo movía curiosamente sus orejitas blancas mientras le miraba de la misma manera.
— Felix...— con su miraba lo examino de pies a cabeza, relamiendo sus labios con evidente lujuria por esa tierna y sexy vestimenta que ahora portaba el dueño de ese precioso cuerpo, sin pensarlo dos veces adentro su mano por debajo de aquella camisa de botones blancos, logrando acariciar la espelta figura del felino con bastante delicadeza, luego de unos segundos solo decidió hablar— Juguemos algo nuevo esta vez mi dulce felino... Que te parece abrir tus hermosas piernas para mi, justo ahora estoy pensando en una cosa y solo necesito que hagas eso, sin embargo, deberás saber que la única cosa que tendrás prohibido será cerrarlas...De lo contrario no dejare que hagas lo que te gusta esta vez.
El pequeño felino quien al escuchas todo asintió y ante sus palabras se acomodo de mejor manera en el regazo del azabache, separando sus piernas sin mas hasta dejarlas completamente abiertas para el mayor, estaba seguro que era algún nuevo juego y tenía curiosidad de saber sobre el mismo— ¿Hoy también jugaremos hyung?.
El mayor sonrió ante esa inocente pregunta mientras asentía, relamió sus labios por segunda vez mientras su mano ya dentro de la camisa del menor empezó a ascender recorriendo su pecho y abdomen con anhelo, la piel del minino era tan suave y tibia que su tacto sobre ella le gustaba bastante, por ello continuo su descenso sobre el dorso de su felino, recorriendo con sus dígitos la suave piel aun por debajo de aquella blanca camisa, sonriendo al sentir los leves estremecimientos que le causaba al menor bajo esas caricias suyas— Sabes algo mi dulce felino... Deberías seguir usando este tipo de ropa, me empieza a encantar como te quedan las falditas y esta te queda mejor ¿Acaso pensaste en mi cuando elegiste su color?.
— Hyung...— su cuerpo extrañamente empezó a reaccionar ante el tacto en su piel, su peluda colita se movía algo inquieta cuando las caricias por su pecho siguieron en aumento ya que había sido agregada la mano faltante que también se aventuró dentro de su camisa blanca y ahora aquellos dígitos detuvieron su recorrido cuando rozaron con sus pezones rosados, causando que la sensación de estremecimiento en su cuerpo lograra sacarle un jadeo bajo ya que los mismos ahora se movían en forma circular sobre sus piquitos logrando estremecerlo inmediato, la sensación aumento cuando su orejita izquierda empezaba hacer lamida y mordida con algo de fuerza logrando solo que su cuerpo se erizara, sus manitos se aferraron como podían en las rodillas del mayor mientras entrecerraba sus ojitos, entregándose a esas sensaciones.
