En el silencio de la tormenta emocional, me encuentro envuelta en un encuentro que resuena en mi oscuridad. No es la primera vez que mis sentidos se pierden en colores que se reflejan en ella, una sinfonía que siempre se desvanece con su partida. Entre aferrarme a sus sombras y aferrarme a la esperanza, mis ansias de vivir se desgastan en sus labios que besan a mi bestia una y otra vez. Cada respiración es una lucha entre el deseo de retenerla y el dolor de saber que, al hacerlo, me consume lentamente.
Sus ojos, un abismo infinito, se convierten en el lienzo donde se proyecta la pureza del momento. La luz del sol acaricia sus cabellos, y en ese resplandor, encuentro mi reflejo, un eco que ansía caer de nuevo en sus palmas. Entre los caminos de sus cuerdas vocales, hay una estática que renueva todo, revelando sus imperfecciones. Ella, y solo ella, es mi anhelo, y así se desvanece mi momentánea tristeza."¿Por qué tus ojos parecen tristes?" Su voz tintada resuena como un eco lejano en mi existencia. Consciente de que no debo permitirme sentir tan profundos sentimientos por una simple mirada y un rostro, me encontre atrapada en las profundidades abismales de la soledad."No hay una razón específica para todo lo que siento", murmuro, mientras la lluvia junto con la música encuentran un ritmo con el que caen mis lágrimas.
"¿Por qué tus ojos azules se tornaron tan oscuros, Maxine? ¿Fue mi reflejo lo que provocó este cambio en ti?" Su mano reposa suavemente en mi mejilla, una caricia que esconde todas las palabras. "Ya no soy solo una imaginación, Max. Estoy aquí", susurra, pero su voz se desvanece en la estática de la radio en mi habitación.Todos los colores de mi vida, una vez vibrantes y alegres, se desvanecen en una paleta descolorida y tenue. Siento una extraña paz en el suspiro cansado, sin las ansias de vivir que me atormentaban en su presencia. "Ámame, ámame, ámame..." resuena en mi mente, pero la imposibilidad de lograrlo finalmente me concede el sueño, envuelto en la soledad infinita que me cubre todas las noches. Siempre pienso, ¿será en alguna de estas noches que la encuentre de nuevo a mi lado?
Mi existencia parece no tener principio, fin o desenlace, como un relato sin rumbo que se pierde en la oscuridad de la noche. Floto y solo floto, ella es como una nota larga y duradera en una canción, un mar lleno de flores sin nada más abajo. Tal vez ella sea esa paz que en otros lugares nunca podría encontrar, pero ahí está. ¿Estará orgullosa de lo que soy ahora? ¿Tal como fue de mí antes?. Todo en ella es un amor escondido en un odio, es un ser que ni mis propios ojos son capaces de reflejar.Hay un lugar donde no me siento sola. Es un lugar donde está mi hogar. Construimos ese hogar y ese espacio con cada uno de nuestros recuerdos y sentimientos. Un hogar colorido lleno de texturas agradables y luces tenues, un lugar en el que yo me reflejo. Todo ese lugar supera cualquier expectativa entre miles, rodeado de árboles y sobre el pasto mojado, y tan acogedor. No hay melodía ni ritmo elevado. Tú eres ese hogar.
Por tu pelo húmedo, la textura cómoda de tu piel, los colores en la mente y la ropa, las melodías en tu voz, el ritmo en tu andar, esas luces tenues que se reflejan en tu tacto y esos recuerdos y sentimientos en tu hablar, los árboles donde encontremos refugio, ese hogar seguro eres tu y todo que siento comienza contigo.
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Un Rato Más Contigo
FanfictionEntre risas y risas sabiamos que el mundo no nos iba a aceptar, no iba a aceptar nuestro amor ni nada de lo nuestro. Maxine y Jane