Déjate Amar. Jungkook ©bnsoel

Déjate Amar; 11

열하나.
Jungkook.

En estos momentos estaba junto a Jimin en el parque por qué Hyerin necesitaba salir a jugar, y tomar un poco del aire fresco.

Los dos observábamos atentamente a mi pequeña hermanita, cuándo de repente Jimin dice y señala hacia una parte en especial.

— ¿Aquella no es Anya? — preguntó el

Mi mirada corre y centra dónde Jimin había
apuntado.

Al parecer, ansiaba mucho verla.

Asentí

Debo admitirlo, con ese vestido de flores se veía bastante bonita.

—¿Aún piensas que está detrás de ti por que está enamorada? — preguntó de repente.

—No empieces con esas tonterías. Cagas el momento — lo desafié con la mirada

En un volver a mirarla, la vi riéndose junto a un hombre adulto. Quién acababa de pasarle su teléfono, digo, por lo que me di cuenta le estaba pidiendo su número.

Mi corazón comenzó a latir fuerte. Y mi puño fue cerrado fuertemente.

—¿Estas celoso? — dijo riendo Jimin

— Calla.

Seguí observándolos, hasta que Hyerin volvió junto a nosotros después de pasar mucho tiempo en el columpio.

En el camino a casa, no paraba de pensar en aquella situación del parque. Y eso me estaba molestando mucho, por qué lo que menos quería era estar de esta manera

Una vez llegamos, Hyerin subió a darse un baño, mientras que Jimin y Yo nos tiramos al sofá.

—Debes aceptarlo, ella te gusta.

—No.

Negué, pero luego lo pensé. Y me arrepentí en el instante.

Suspiré antes de hablar —No lo sé Jimin ¿Y si algún día llega aparecer?

—Pues aparece — se alzo de hombros — Sólo vive e presente Jungkook, no sabrás lo que puede pasar en el futuro.

Lo llamaron desde su teléfono, el hablo antes de contestar: Solo no te atormentes demasiado..

Me quedé pensativo, y me pregunte a mi mismo
¿Qué es lo que quiero?

Y en mi cabeza no hallaba ninguna respuesta

Eso me ponía bastante mal.

—Debo irme amigo, nos vemos mañana. — dijo Jimin. Luego de haber terminado con su llamada

—Cuídate, nos vemos luego.

Lo acompañe hasta la puerta, y luego subo a darme un baño.

Me estaba inquietando mucho la situación en la que estaba.

Por culpa suya he dejado de pensar en la pequeña niña que siempre soñaba, y con la única que tengo recuerdos de mi infancia.
Mi mente solo se centraba en Anya