"Tu deber siempre debe ser respetado nunca mancillado por gente que no sabe con lo que se mete, debes demostrar porque es tu deber así sea de una buena manera o hasta que te vean como un ser poco piadoso con tal de que no se metan donde no deberian"
Aquellas palabras resonaban de nuevo en mi cabeza mientras estaba en mi sala de estrellas donde podía ver cada universo y mundo, simplemente para ver que todo marchara correctamente y si un pequeño error ocurría el universo pudiera arreglarse por sí mismo yo siempre fui educada con la idea de que nada esta escrito de manera permanente, siempre puedes cambiar tu destino nada es absoluto más que en algunas ocasiones y excepciones.
Mi nombre es Axoltezcacóatl, Axolt para acortar soy hija de tres importantes dioses aztecas de los cuales proviene mi nombre, Xolotl, Tezcatlipoca y Quetzalcóatl, nací debido a una disputa entre ellos tres en la cual se derramó su sangre sobre un licor sagrado y ese mismo licor callo al agua, de ahí nací yo y debo decir fui la mayor alegría de la familia hasta mis padres olvidaron su discusión, para los demás dioses extranjeros fui un milagro ya que no se había dado un nacimiento así de poderoso desde hace siglos.
Simplemente estaba bostezando lista para retirarme cuando uno de mis ayudantes llegó corriendo con un informe, estaban interfiriendo en mi trabajo otra vez.
–¿Quien es tan estúpido para meterse en cosas que su cabecita aún no puede llegar a comprender?– Dije sobando el costado derecho de mi cabeza mientras suspiraba.
–Un grupo se hacen llamar Spider-society dicen proteger los multiverso de la anomalías su líder un tal Miguel O'Hara– Se escuchaba el nerviosismo en su voz cuando me lo dijo.
–No me estas contando todo así que dilo de una vez o me enojare más– Miraba hacia los jardines de mi hogar escuchando atentamente hasta que voltee a verlo con lo último que dijo –Repite.
–Quieren atrapar a alguien de uno de los universos que se reparo solo... para evitar que no cumpla su evento canónico como le dicen ellos a su destino señora mía.
Me quedé en silencio unos momentos analizando cada palabra dicha, así serían entonces las cosas, tal parece que esto no sería algo que podría ignorar fácilmente camine hacia la salida dando indicaciones a todos mis ayudantes que corrían de un lado a otro empezando a hacer lo indicado.
–Quiero que preparen todo identidades para mi y un equipo en cada universo quiero que tengan todo listo para esta noche necesitamos saber por dónde podríamos atacar en caso de ser necesario, iré a dar aviso de donde estaré cuando regrese partiremos– Me puse mi capa con cuidado saliendo de ahí y emprendiendo camino al palacio ancestral para avisarle a la gran abuela primero.
Era lo mejor así servía para que mis padres no se pelearan en cual de los tres era el primero en darme su bendición para el viaje y misión que en pocas horas realizaría para defender mi deber.
Entre al palacio ancestral dandole mi capa a uno de sus sirvientes caminando a su jardín donde sabía que estaría una vez estuve detrás de ella sonreí y me acerque a su lado viendo sus maravillosas plantas tenía tanto plantas existentes en el mundo terrenal como plantas que solo se daban en nuestro mundo celestial.
–Ilamatl Cihuacóatl como has estado– Dije bajando mi frente sintiendo como la besaba con amor y ternura que solo una abuela tiene.
La gran abuela Cihuacóatl era la mayor de todos los dioses mexicanos, con una sonrisa me llevó a sentar en una de la bancas del jardín.
–O mi linda Axolt que te trae hoy por aquí, acaso viniste a comer pan de muerto y cuidar de las plantas con esta vieja diosa mi niña linda– Lo decía con aquella sonrisa que calmaba mis preocupaciones como si fuera la cura de todos mis males.
–Ilamatl no diga eso usted sigue siendo igual de joven que antes, de echo aunque me gustaría hacer eso tengo otros asuntos que quiero hablar antes– empece a decirle lo que me comentaron y como tendría que ir a solucionarlo mi abuela pareció molesta ante lo que escuchaba de la historia.
–Oh mi nieta esos mortales no saben con qué juegan es peligroso y en algunos casos acaba con la destrucción de su mundo, esta bien ve porfavor con cuidado tienes mi bendición para lograr tu objetivo, no te preocupes yo le diré a tus padres y al resto de la familia donde fuiste pero ahora debes partir rapido.
–Gracias, bien me voy Ilamatl muchas gracias te veré pronto– Bese su mejilla con cariño para despedirme y salir.
–Por cierto te darán unas cosas en el camino tal vez en esos universos no las haya y me preocupa que no te alimentes apropiadamente.
Solo asentí y recibí una mochila mágica con muchas cosas dentro y también una caja pequeña de obsidiana, vi a la abuela con curiosidad sabiendo para que era esa caja pero aún así me preguntaba porque me la dio ahora, ella solo sonrío y con voz tranquila solo respondió.
–Se abrirá cuando se encuentre a la persona indicada.
Camine de regreso a mi palacio en silencio con calma, miré el cielo que empezaba a pintarse en aquellos tonos púrpura antes de que las estrellas empezarán a adornar el firmamento, pensando en lo solitaria que a veces podía ser la eternidad y no tener a alguien a tu lado.
Entre y camine a la sala donde tenía el portal que podía llevarme a la dimensión que quisiera, vi a el equipo conformado de cinco el cual me acompañaría listo con la ropa acorde a donde llegaríamos primero, y a los demás ayudantes listos para cualquier cosa que se necesite, también tenían un cambio de ropa para mi listo y los informes con todo lo que necesario de los universos en los que haríamos las investigaciones.
–Señora mía ya esta todo listo, estaremos alertas para cualquier emergencia.
–Bien entonces vamos– Estaba poniéndome la sudadera con calma y después amarre mi cabello en una coleta alta –Apresuremonos.
Ingresamos al portal apareciendo en el vestíbulo de una mansión solitaria y abandonada a las afueras de New York en una zona boscosa y residencial.
–Bien arreglemos esta casa y preparemos todo quiero que estemos listos para mañana en la mañana.
Empezamos con las reparaciones y a amueblar la casa una vez terminamos cada uno se fue a su habitación a descansar un poco para mañana iniciar nuestro trabajo.
Acostada en aquella cama miraba el techo con un solo pensamiento acabar rápidamente con esto y volver a casa.
Prepárate Miguel O'Hara mañana empieza tu peor pesadilla, nadie se mete con el deber de un dios o diosa y sale impune.
Glosario del capítulo
Ilamatl: Abuela
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EL DEBER DIVINO
General FictionTodos sabemos esto nunca puedes jugar a ser un dios y hacer su trabajo porque no sabes que consecuencias habrá Desde un principio aprendemos eso cuando se enseñan nuestras responsabilidades con los mundos y universos tal parece que los humanos les...