[16]

7 3 1
                                    

Por primera vez en mucho tiempo, quería ser sincero completamente con alguien; conmigo mismo. Dejar que salgan a flote todas esas cosas que lo único que hacen es hundirme, como si estuviera en el océano y una cadena estuviera atada a mis pies; arrastrándome a lo más profundo e impidiéndome salir hacia la superficie. Para respirar, para estar en calma, para tener paz.

─ Cuando leas mi alma también, te darás cuenta de que jamás te mentí tampoco ─ expresó mientras se sentaba nuevamente ─ Y que nunca lo haré.

── Lo sé, TaeHyunnie, lo sé muy bien. Ahora, ¿quieres comenzar? ─ inquirió imitando la acción de Taehyung.

── ¿Qué debería preguntar exactamente? ─ preguntó dudoso ─ No quiero ser indiscreto y preguntar algo que no me incumba o... que te haga sentir mal.

Buena pregunta, ni siquiera yo estoy seguro de qué cosas preguntar. Siempre tengo algo que decir, pero con TaeHyung, es como si mi mente se quedara en blanco; no en un mal sentido, sino que, al estar con él... me olvido de todo.

── Pregúntame lo que desees, ya te dije que por esta noche y siempre, en realidad, seré un libro abierto para ti. Digamos que esta será una noche de preguntas.

── De acuerdo, está bien, yo... ─ balbuceó ─ Sé que tenías problemas con tu padre, que no la pasabas bien y eso. Lo que nunca supe fue la razón o el detonante para que te fueras así sin más, sin decir adiós.

Sentí una punzada en el pecho de solo recordar lo que sucedió aquel día, vidrio esparcido por todo el suelo, mi padre borracho. Sus manos alrededor de mi cuello que me impedían respirar.

── Esto que te contaré, lo sabe YoonGi únicamente, ni cuando estuve con JiMin se lo conté ─ admitió ─ Me daba vergüenza y, me daba un feo sentimiento de solo recordarlo, no digamos contarlo. Aquella última noche que nos vimos ─ dio una gran calada de aire y continuó hablando ─ Regresé muy contento a casa, no fue hasta que noté que había vidrio por todo el suelo, todo tirado y roto. Pensé que no había nadie, hasta que escuché un ruido en la cocina, era mi padre quebrando más cosas; tirando todo al suelo.

Mierda, siento como las lágrimas luchan por salir, por favor, no.

── Se puso a gritar cosas, decirme cosas hirientes y ─ dijo con la voz entrecortada ─ Cuando menos lo esperé, sus manos estaban alrededor de mi cuello, en ese momento... sentí que mi vida acabaría allí mismo. Pero no quería morir, no así, con el poco aliento que me quedaba; giré mi cabeza como pude y noté que un vaso estaba a mi lado, no dudé en agarrarlo y estrellarlo contra su cabeza. Soltó su agarre y yo recuperé el aire, me levanté y fui directo a mi habitación; metí cosas en una mochila y sin pensar en nada más, dejándome llevar por el miedo, preocupación y quién sabe qué otras cosas, me fui.

Observé a TaeHyung, me escuchaba atento y pude notar como sus ojos comenzaron a cristalizarse. No aguanté, rompí en llanto.

── Me fui, te dejé, no te dije ni un misero adiós ─ murmuró débil mientras lloraba ─ Perdóname, perdóname, por favor.

Me preocupé cuando vi que no salían palabras de su boca, era entendible, pero necesitaba que me dijera algo. No fue mucho tiempo hasta que sentí sus brazos rodearme, no sabía lo mucho que necesitaba ese abrazo en ese momento. O quizá, un abrazo de él.

── No tienes que disculparte ─ dijo con voz suave en medio de aquel cálido abrazo en el que se encontraban ─ Has sido fuerte, muy fuerte.

Quiero creer que sí, que sí he sido fuerte.

── Perdiste tu camino por un momento, como si estuvieses en un inmenso bosque y ya no encontraras la manera de cómo regresar. Te sumergiste en un profundo sentimiento de dolor, la ausencia de todo aquello que querías hacer y lograr ─ soltó dejando de abrazar a JungKook poco a poco ─ Pero ya estás aquí, encontraste el camino de vuelta, y que aun cuando te sientas perdido o no sepas qué hacer o hacia dónde ir; yo estaré ahí para guiarte, para hacerte compañía y tomar tu mano. Donde tengas la certeza de que no la soltaré nunca.

Drᥱᥲmιᥒg of ყoᥙ || 𝑇𝑎𝑒𝐾𝑜𝑜𝑘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora