Caminé por un callejón oscuro, y muy sucio, olía bastante mal para ser sincera, es que está gente no limpia...
Ariel:- si si tía, ya me lo has dicho más de 3 veces.
T:- es que tú no conoces ese barrio bien, te dije que fueras con jad.
Ariel:- sabes que el y yo no nos llevamos bien.
T:- bueno, en ese barrio hay muchos asesinos.
Ariel:- no es nada, se cuidarme sola, sabes que eh matado más de 10 personas.
T:- bueno tienes razón, cuando Frank te entregué la droga vienes rápido, ojo que no te la quedes sabes que te puede ir muy mal.
Colgué, ya no quería escuchar a la vieja de mi tía, guarde el teléfono en mis bolsillos.
Iba caminando rápido por ese callejon, era grande para ser sincera, habían muchas personas tiradas y borrachas.
Sentí unas manos frías en mis dos hombros, miro atrás y eran dos locos.
X:- adónde vas princesa...
Decía mirándome de abajo hacia arriba, con una mirada muy brusca y muy deseosa....
Ariel:- adónde no te incumbe.
Trate de alejarme, pero ellos, me detuvieron.
Ariel:- haber, si están aquí solo para joder, los invito a irse mucho a la verga.
Me dieron un puñetazo fuerte en la cara, haciéndome caer, me hizo enojar y me levanté.
Ariel:- a muy machito no?
Trate de defenderme, pero eran locos y los locos saben defenderse bien.
Me tomaron de las manos, y me votaron al piso.
Me dio asco, ya que las calles estaban muy feas y sucias.
X:- haber pequeña, harás todo lo que nosotros pidamos.
Decía riéndose, como un loco, oh un psicópata...
X:- solo nos vamos a divertir contigo pequeña...
Trate de levantarme, pero uno de ellos estaba encima de mi.
Me dieron tanto asco, estos hijos de puta no saben con quién se están metiendo, pero son dos, y son muy fuertes, ¿Que puedo hacer?
Empezaron a quitarme la ropa, pero me moví tratando de no dejar que me quiten la ropa.
Estaba apunto de ser violada, no, eso no, todo menos eso, me da tanto asco.
Ariel:- ¡Haber pequeña tienes los putos huevos!
Con mi rodilla le pegue en su parte intimidad, haciéndolo quejarse del dolor, el otro fue muy inteligente y me tapo la boca, sin poder hablar, y sin poder moverme.
A lo lejos escuché una voz, los locos miraron atrás.
Y era...
Era Bill.
¿que hacía aquí?
El comenzó acercarse. Mire y tenía una pistola.
Bill:- haber, dejenla tranquila, oh quieren que dispare.
Decía apuntandolos con el arma.
Yo aproveché que los locos estaba medio distraídos en eso, y saqué una navaja que tenía guardada, y se lo clave en la cabeza a a uno de ellos...
X:- ¡AHHGGG!
Dijo gritando, cayendo al suelo, el otro loco lo miro y empezó a venir hacia a mi, pareció que no le dio más importancia al arma de Bill.
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a goodbye without farewell || Bill Kaulitz.
Short Storydetrás de una persona con un reflejo que demuestra malas intenciones y rebeldía, hay un alma deseando dejar de sufrir.