Admirador Espectral.
- ¿Algún progreso?.- El hombre de bata blanca observaba el archivo en sus manos.
- Ninguno.- El hombre de uniforme blanco suspiró con pesadez mientras negaba.- Aún sigue allí sentado, mirando hacía la ventana sin decir una palabra.
- ¿Cuánto tiempo ha pasado ya?
- Hoy se cumple un año de su condena y todos los días es lo mismo.- Se cruzó de brazos.- Camina como si no tuviera alma, arrastrando los pies y con la mirada perdida. No habla con la psiquiatra, no se integra con los demás y no emite ni siquiera un sonido.
- Al principio cuando llegó se la pasaba gritando. Decía que todo lo que había hecho tenía una justificación.
- ¿Qué tipo de justificación podría tener lo que hizo?.- Lo apuntó.- Ese tipo dejó a su esposo como un calador Doctor. 75 puñaladas.- Su expresión se teñía de desagrado.- Incluso quienes los conocían aseguraban que la víctima lo trataba como si fuera su mundo. No entienden cómo fue que este sujeto enloqueció de la noche a la mañana.
- Llegó asegurando que su esposo era otra persona.- Se quedó viendo hacía el hombre dentro de la celda.
- ¿Qué?
- Decía que su esposo estaba poseido.- Negó.- Por lo que vimos mediante su expediente clínico cuando fue ingresado, este joven venía acarreando ciertos problemas de ansiedad y delirios de persecución desde hace tiempo.
- Si...- Suspiró.- Supe que en el pasado fue un gran y reconocido escritor que fue víctima de acoso.- ¿Cree que eso le afectó?
- Es lo más probable. Quizás toda esa presión y un mal manejo de profesionales a la hora de atenderlo solo agravaron la situación.- Chasqueó su lengua mientras negaba. En su rostro se dibujaba una leve lastima.- Es una lastima que alguien tan talentoso haya terminado así.
- Quizás tantas historias de fantasmas a la larga terminaron comiendo su cerebro.- Ambos hombres se alejaron de la celda.
A pesar de parecer estar ausente en aquel momento, el joven paciente que se perdía en la brillante claridad que se colaba por su pequeña ventana pudo escuchar claramente la conversación de los dos hombres.
Pudo percibir en sus palabras lástima, sorpresa, confusión, curiosidad, incluso desprecio. Aquella teoría de que debido a sus historias ahora se encontraba sumido en aquella amarga condena incluso le pareció algo graciosa.
De hecho, deseaba que fuera de esa manera y que no como en realidad todo había sucedido. No de aquella manera tan atroz, terrible y espantosa que lo atormentaba cada día de su vida.
Todavía puede sentir como el fuerte olor a sangre invade su nariz y empaña sus sentidos. Baja su mirada a sus manos y puede jurar que en ellas aún queda cierto rastro de aquel viscoso y tibio líquido carmesí.
En su mente sigue presente la imagen de Allen sobre aquella cama teñida de aquel tétrico líquido rojo que empezaba a derramarse por el suelo. Su cuerpo lleno de heridas, irreconocible, convertido en un despojo del cual no le quedaba un solo rastro de humanidad.
Aquella terrorífica imagen, esa gélida sensación y el desagradable olor lo han estado persiguiendo durante un año completo. Torturándolo, exprimiendo su corazón, llevándolo al borde de la locura.
Ya no grita proclamando por su inocencia, mucho menos grita para explicar el porqué se dieron las cosas. No vale la pena, nadie le cree.
Su familia, aquellos que fueron sus amigos e incluso aquella familia que lo adoptó como un miembro más el día en que delante de ellos, él y su esposo Allen se dieron el sí definitivo. Todos ellos quienes una vez lo amaron, admiraron y cuidaron, ahora lo ven como un monstruo.
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Admirador Espectral II
HorrorUn año y medio se ha cumplido desde que Xiao Zhan descubrió el horrible secreto que guardaba secretamente su esposo. Ahora, encerrado en aquellas cuatro paredes no solo vive atormentado por las consecuencias de sus actos sino por algo mucho más fuer...