my sexy roommate | JJK

oh demons.

[...]

— Gracias por ayudarme con las cosas — dije sarcástica mientras veía como el estaba sentado en el sofá mirándome — ¿Qué mierda me miras jovencito? — hablé enojada y este se levantó de su lugar.

Se acercó a mi y sacó la caja que llevaba en mis manos para luego dejarla en el piso. Posó ambas manos en mi cintura y me acercó a él.

— Primero, no me digas nunca más jovencito señorita Eunha, tienes la misma edad que yo... — susurró en mi oído con una voz ronca —Segundo, no trates de provocarme, tengo novia y no me interesa otra chica — miré disimuladamente mi escote y mierda, no me había dado cuenta.

— Tu eres el idiota que me mira — lo empujé y me agaché para juntar la caja que había en el suelo — Además ¿Qué pasa si yo le muestro a tu novia el mensaje que me enviaste hoy a la mañana? — lo miré fijamente y comencé a reírme.

— No lo hagas, haré todo lo que me pidas —habló mientras me seguía hasta la habitación —Aunque, no me enviaste la foto... no hay ningún problema con eso — dijo e ingresó conmigo a mi dormitorio.

Este se apoyó en el umbral de la puerta y se quedó observándome sin decir nada.

—¿Qué haces aquí? Vete Jungkook — lo empujé y cerré la puerta en su cara.

Nunca me había estresado tanto, aunque de alguna manera me estoy divirtiendo con el.

[...]

[...]

Salí de mi habitación con la ropa que iba a llevar al baño; quería darme una ducha e ir a descansar porque ya era muy tarde y mañana tengo que ir a trabajar.

Nunca me había dado cuenta que Jungkook ya estaba en el baño, por lo que me llevé una gran sorpresa.Este estaba completamente desnudo, así que pude ver todas sus partes.

Ambos nos sorprendimos y apenas me vió, este cubrió con sus manos su entrepierna. Yo tapé mi cara avergonzada, de verdad me estaba aguantando la risa.

— Mierda — gritamos al unísono — Vete por favor, y aprende a golpear antes de entrar Eunha — habló furioso, y yo giré sobre mis talones cerrando la puerta.

No podía creer lo que acababa de suceder. No llevamos ni un día conviviendo y ya pasaron un montón de cosas.

Recordé lo que mi amiga me dijo antes "debes despejarte de todos tus problemas, tal vez el podría ayudarte" y se me ocurrió una maravillosa idea.

Saqué mis shorts y mi pequeño top quedándome solamente en ropa interior. Tenía ganas de divertirme y distraerme un rato, y que mejor manera que esta.

Volví a ingresar al baño, y este ya se había colocado una toalla alrededor de su cintura. Despegó su vista de su teléfono para mirarme y mierda, se me revolvió el estómago de la vergüenza.

— ¿Qué haces? — preguntó serio mientras observaba como sacaba lo último que me quedaba ropa.

Ignoré completamente su presencia, y encendí el grifo para poder ducharme.

Mis manos recorrían todas mis partes delicadamente y el estaba ahí observando todo mi cuerpo; no es porque lo podía ver, claro que no. Yo estaba de espaldas a él, pero sentía su mirada pesada en mi y se que lo excitaba.

De un momento a otro sentí sus manos posarse en mis caderas y como me atrajo hacia el.

— No me hagas esto, apenas nos conocemos hoy Eunha — musitó en mi oído izquierdo y mi piel se erizó — Vergüenza no tienes al parecer — sus manos descendieron por todo mi trasero.

—Y-yo me estoy duchando como una persona normal, joven Jungkook — sentí su suave tacto ir hasta mi pelvis y solté un jadeo — T-tu deberías controlarte — di media vuelta y quedamos cara a cara.

El agua caía por todo su hermoso cuerpo y rostro, y sus grandes manos sostenían mi pequeña cintura de una manera tan sutil.
Sonreí maliciosamente y acerqué mi rostro al suyo para poder unir nuestros labios pero...

— Despierta Eunha, debes ir a trabajar...