Capítulo 11 "Amienemigos"

246 13 7
                                    

Abro mis ojos muy lentamente mientras el dolor de cabeza se adueña de mí.

Estoy en una habitación muy luminosa, podría describirla como de "princesa" con tonos crema, rosa y pastel.
Obviamente, no tardo en darme cuenta que no estoy en mi hogar, así que trato de recordar como llegué aquí: Dallas, fiesta, Jack, violación y chaqueta; es la única información "valiosa", y aún así no sirve de nada.

-Bien Rose, te levantaras y buscaras alguna señal de vida existente en 3, 2, 1... 1 y 1/2... 1 y 1/4... Okey ya, basta de juegos.- Dicho esto me levanto.

¡No se crean que no estoy asustada! Pero el dolor de cabeza también conocido como "jaqueca" quita toda evidencia de razonamiento en mí.

Una vez levantada (y luego de haber confirmado que todo estaba en su lugar con respecto a mi ropa) Salgo de la habitación... Para encontrarme con un mini pasillo con otras 6 puertas. Déjenme adivinar, Casa de Pepsi. Si, Pepsi. Ese será su apodo hasta el fin de los tiempos. Se habrá puesto en modo "Caramelo" ayer conmigo, pero aunque una lata de Pepsi se vista de "Coca-cola", Pepsi se queda.

Esto solo puede ser el "mini apartamento" de su hermana (una cuchitura por cierto).
Decido no ser curiosa y salir a buscar a Dallas.

Debí suponerlo... ¿Recuerdan las tres puertas? La mas alejada del ventanal es la de su hermana. Para que vean que tampoco soy tan bruta con las direcciones.

Me dirijo directamente al cuarto de Dallas abriendo la puerta, puede que un poco muy bruscamente.

-Entiendo tu enfado pero tampoco es para que me tumbes la casa al estilo de Hulk.- Siento un escalofrío en mi espalda. Me doy la vuelta rápidamente para encontrarme a un aseado, perfumado y egocéntrico Dallas abotonándose su camisa blanca.

-¿Por qué estoy aquí?- pregunto rápidamente.

-Porque una vez que una madre da a luz, ese pequeño retoño pasa a formar parte de el resto de la humanidad que es capaz de usar el verbo "ser" o "estar". Estás aquí porque así lo decidió tu madre, y en gran parte, tu padre... O bueno, los test..- ya había escuchado demasiado.

-No necesito una clase de biología, solo dime por qué estoy aquí.

-Cierto que necesitas es física..- Dice mientras me mira con una sonrisa, al ver mi cara seria continua.- estás aquí porque te he traído.

- ¡No me j*das! Pensaba que había llegado sonámbula.

-A mi no me j*das con tu sarcasmo, haz preguntado por qué estás aquí, no por qué te he traído aquí en vez de llevarte a tu casa.- Touché.

-¿Por qué me haz traído a tu casa?- pregunto con una sonrisa fingida y el sonríe. Ampliamente.

-Te he traído porque así lo quise- dice y su sonrisa se amplía mas, si es que se puede.

-Entonces, Mr. Dallas McCarthy ha decidido traer a su indeseable enemiga, su peor pesadilla, el engendro que hoy es a su casa... Porque quizo. Tiene mucha lógica.

-Espera, Espera 1. Creí que habíamos dejado atrás lo del engendro.

-Ya quisieras. Es como querer quitarme un tatuaje permanente

-¿Y no podía ser uno temporal? ¿De esos que vienen en los chicles/goma de mascar?

-No. No soy tan fácil McCarthy.

-Difícil nivel Dios te queda pequeño- Luego de unos instantes prosigue- en serio Rose, no estaba en mis momentos- ¿lo estás alguna vez? Pienso en mis adentros-y antes de que digas otra cosa déjame seguir con el tema y la enumeración.- para un momento, supongo que recordando lo que quiere decir (su cara es épica si me lo preguntan) y luego sigue- 2. No solo es "porque quise", si mal no recuerdo estabas "Dormida", aunque el término "Drogada" es más apto, no quería ser tan directo... En fin, no me pareció correcto dejarte en tu casa estando esta sola, creí que era mas seguro que vinieras conmigo, y digas lo que digas, así fue.

Soy la "Nerd" ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora