OJOS BRILLANTES (HALLOWEEN KOOKV)

3. LA INOCENCIA

Taehyung lo miró con dudas.

Que podía ser tan malo que necesitará ser destruido. Y porque prefería ser destruido a intentar cambiar?

-Tu mi responsabilidad? 

A duras penas me hago cargo de mis abuelos, lamentablemente no puedo hacerme cargo de alguien más. Necesitas descansar y un lugar calido para reponer energías.  Después puedes seguir tu camino.

Taehyung estaba dolido.  Sentía muchas cosas por aquel extraño hombre. Nunca en sus 22 años había sentido nada por nadie más que rechazo de los aldeanos por ser pobre y tener que cuidar a sus dos abuelos que daban bastante trabajo.

Pero eras la vida que le habia tocado vivir. Siempre pensó que otros tenían una vida hermosa mientras el en su pobreza a duras penas alimentaba a su familia y comía pequeñas porciones día por medio para seguir y seguir.

Hubiera deseado no tanto lujos pero al menos estabilidad.  Pero quien más sueña es  quien menos puede tener.

Y Taehyung tenía que ser frío para muchas cosas. Y entre ellas estaba el claro ejemplo de sus abuelos que habían trabajado toda su vida en el campo para terminar en la pobreza.

Taehyung sabia que tenía que salir de allí para buscar suerte en otros lados. Pero eso sólo podría pasar cuando sus abuelitos se encontrarán con Dios.

Ese hombre hermoso despertada cosas muy bonitas en él.  Deseo de cuidarlo,  deseo de tenerlo para si. De que sea su compañía.
Pero las cosas eran como son. Debía ser realista.

Jungkook lo miró y sintió una mezcla de emociones. O al menos eso es lo que parecía.
Caminaba con la cabeza gacha pensando. Mientras Taehyung hundía lo que sentía en lo más profundo de su corazón y pensaba como dejar ir al misterioso hombre el día siguiente.

Llegaron casi al amanecer al pueblo.  Taehyung lo condujo al granero,  y confiado que sus abuelos ya casi no se paraban de la cama, le puso unas mantas y un pequeño cojín hecho con paja. Y le pidió que bajo ningún motivo se acercara a la casa. Que él vería como llevarle algo de comer a primera hora de la mañana.

Jungkook se quitó el raído abrigo que traía,  y dejó al descubierto su cuerpo musculoso y delgado.

Taehyung no pudo dejar de observar lo increíblemente esculpido que era y lo perfecto que podía verse solo en un pantalón oscuro. Pero rápidamente sacudió sus pensamientos y con respeto lo dejó solo y cerró la puerta.
Sacudiendo la cabeza se retiró a la casa.

Mientras su cabeza daba vueltas pensando en los acontecimientos que había tenido que vivir en tan pocas horas. Esperaba que unas horas de sueño aclararan su mente. Porque muy pronto tendría que levantarse de nuevo a buscar que comer. Sus abuelitos esperaban en casa.

Quizás tendría que ir al pueblo por algo de pan que a veces el panadero le regalaba. O quizás ir a la iglesia, a pedir algo de ayuda del padre.
Lo habia  hecho desde niño. No era una novedad. Lo importante era sobrevivir. 

Cerró los ojos en su camastro, y rápidamente cayó en un profundo sueño. Sueños extraños y complicados llenaron su mente,  mientras las horas pasaban. Al salir el alba , sus ojos se abrieron.

Se limpió la cara con cansancio. Y corrió al granero. Esperaba ver al hombre pero también sabía que lo más probable es que ya hubiera partido.  Así que tenía que aceptarlo y seguir con su vida. 

Al acercarse vio la puerta  abierta, y un pequeño hilo de sangre que recorría desde la entrada lo hizo pararse en seco.

Taehyung imaginó que podría ser un animal herido que se había escondido,  así que se acercó con cautela...