En algún lugar des conocido te despiertas te enfrentas a un ejercito gigantesco, detras de ti hay unas cavernas por las que escapan muchísimas personas, sobretodo personas que te importan, eres un guerrero experimentado y fuerte, ninguno de los enemigos podria vencerte tal vez incluso si fueran entre varios, pero aun asi desiden cargar, es muy importante ir tras los que estan escapando, el primer encuentro ocurre y tu habilidad te permite derribarlos sin apenas esfuerzo, los cadáveres se van apilando cada vez mas y eso te permite tener posiciones ventajosas contra el enemigo, pero son demasiados, las heridas que aun siendo pequeñas se van acumulando poco a poco, el enemigo antes eufórico por la supremacía en número, se sentia cada vez mas aterrado y el valor de cargar se iba reduciendo igual de rápido que su enemigo iba perdiendo fuerzas y de repente, lo inevitable sucede, tus heridas cobran tu vida, pero tu cuerpo se mantiene en pie por puro instinto, en la cima de una enorme montaña de enemigos abatidos que tapaban la mayor parte de la entrada a la gruta por la que los tuyos escaparon, dejando solo un pequeño espacio delante del cual recides aun en pie, tu postura de batalla permaneció firme e inmóvil, tus ojos apagados aun emiten una agudeza al enemigo que los petrifica en sus lugares, ellos saben que estas muerto, pues hace ya tiempo que dejaste de respirar y tus heridas dejaron de sangrar, pero el miedo persistente de solo acercarse a ti no les permite moverte del camino y avanzar, pasaron horas y una tormenta se presentó, nada habia cambiado tanto tu como el enemigo seguian igual, hasta que el día llego y el sol iluminó las caras del enemigo haciendolo reaccionar por fin.
Perdieron, lo tienen muy presente, incluso si el enemigo yacía muerto frente a sus ojos, estaba claro que perdieron, se sentaron en el suelo viendo tu cadáver en silencio, como si de una marcha fúnebre se tratará, refuerzos llegaron puesto que no había habido ninguna noticia del ejército, el comandante de los refuerzos tomo al lider del ejército del cuello y pregunto que habia ocurrido, el ejercito partio hacia varios días y al no recibir respuesta vino en su auxilió, pero los encontro sentados frente a tu cadáver, el lider se desvistio quedando solo en sus sus prendas mas basicas y una camiseta, entrego todo al comandante incluida su arma y dijo entre lágrimas con la mirada cabizbaja "aun no cayo", , para pasar a retirarse.
Muchos otros siguieron su ejemplo dejando de lado su arma y partiendo la marcha, incluso los que no conocían otro camino que el de la batalla, jamas podrían volver a sostener un arma, las aves carroñeras ya rodeaban la zona pero no se decidían a bajar, incluso con el jugoso banquete de cientos de cadáveres no hacian mas que volar en circulos como si
esperarán algo, el comandante furioso exclamó con temor que el hombre habia muerto, que se fueran y lo quitarán, pero el temor por lo que sus compañeros habían presenciado los acompañaba, hartó y con un nudo en la garganta decidio ir y apartarlo por su propia cuenta mientras veia la fiereza con la que ese hombre había vencido tan basto ejercito, eso solo sembró más miedo en su corazón conforme se acercaba al cuerpo, los músculos del cadaver aun estaban muy tensos a pesar de las horas transcurridas tras su muerte, pero el no se percató y al tocar el cuerpo como un instinto que habia sido desarrollado a través de las batallas el cuerpo se movió, de un momento a otro el comandante cayó muerto y seguido de eso tu cuerpo por fin se desplomó, inmediatamente los carroñeros actuaron empezando por el cuerpo del comandante que recién habia fallecido por lo que permanecía más fresco. Los soldados corrieron hacia la cima de aquella pila, pero no en auxilió de su comandante, parecían poseídos por una fuerza misteriosa y entre lágrimas, ahullentaron a las aves y recogieron el cuerpo de su enemigo como si fuera su propio hermano, cavaron una tumba frente a la gruta donde lo sepultaron, y en su lapida en la que tallaron su imagen al morir como signo de respeto, sobre su nombre que en el futuro seria símbolo de fiereza, destreza y resistencia, apodandolo el EN GLORIA DEL INQUEBRANTABLE
