primer día

202 28 0
                                    

— ¿Qué me acabas de decir, Im Nayeon?

Apenas van llegando y ya están lloviendo vergazos.

La rubia tragó en seco cuando hizo contacto visual con su novia. Amaba sus ojitos de gatito, pero también le asustaban así bien feo.

— Pero, pero-!

— Pero nada, ¿¡vienés llegando y ya me dices histérica!?

— Pero si yo no lo dije... — Nayeon intentó defenderse, realmente lo intentó.

— ¡Pero lo pensaste! — Acusó la menor mientras se cruzaba de brazos.

Ahora leía la mente, increíble. Cosas de Myoui Mina, no lo entenderíamos.

— A-así no se pue-puede Nayeon.

— Pero no llores, bebé...

— ¡Pero tú empezaste! — Sabía que eso no era verdad—

— Pero si nunca te dije histérica.

— ¡Ah!, ¿ahora me estás diciendo mentirosa?

“Mirada de gatito vuelve” Pensó la pobre rubia sin poder hacer contacto visual con Mina por la que intimidaba.

Entonces una idea corrió por su cabecita: cambiar el tema.

No le iba a ser tan difícil en esta situación, lo difícil era que Mina le siga y no se quede sola toda la semana metida en que supuestamente le dijo histérica.

— ¿Si sabes que te amo mucho, Minari?

La castaña había dejado por fin de soltar lagrimitas de cocodrilo.

— Ajá si, ahora ven y dame mimos.

La rubia hizo caso enseguida, sabía que sería peor si se negaba, y bueno, para eso estaba, para cuidar y mimar a la castaña.

Gobernada.

— Yo también te amo, idiota.

— Sí, pero soy tu idiota — rió Nayeon para después dejar un beso en la cabeza de su indispuesta novia.

Sería una larga semana, muy larga.

Aquellos cambios de humor tan repentinos le recordaban a su madre cuando estaba embarazada de su último hermano, llegando a pensar seriamente que sus dedos podían llegar a hacer magia. Mirándolos fijamente bajo la atenta mirada de la menor.

— Nayeon.

— ¿Uhm?

— Estoy menstruando, no estoy embarazaba. Ya deja de ver tus dedos colo si esos fuesen mágicos —La habían pillado.

— Es que... ¿Segura que no tienes síntomas de embarazo?

“Im experta en cagarla Nayeon” Debería llamarse.

Mina la miró con mucha, demasiada seriedad en sus bonitos ojitos de gatito.

De verdad habían veces que llegaba a creer que tenía una idiota por novia.

— ¡Si estuviese embarazada no me estaría retorciendo de dolor mientras literalmente litros de sangre me salen por la concha! —Exclamó levantando sus brazos, ¡Oh! aquí viene la drama queen — Sí vieras ese puto baño pensarías que mataron a alguien y tu me preguntaras: “Oh preciosa, maravillosa, diosa Mina, ¿por qué el baño parece una escena del crimen” —Tomó un respiro— Y te voy a contestar: “Oh querida Yeonnie... ¡Estoy en los primeros días de desangración!”

—...

— Hablas como si no menstruaras, niña.

— Sí lo hago... pero no me llega tan feo como a ti, mis cambios de humor no son tan notorios y no pasó de ser dulce a histérica en dos según... dos...

Pero deja de cagarla más, Im.

— ¡Ves que si me estás diciendo histérica! —La rubia lloró en sus adentros, quería que esta pesadilla llamada: “Mi novia anda con la regla” terminara—

— Pero si-! Ay...

La castaña se dió la vuelta con el ceño fruncida, esta “discusión” la estaba cansando y le había dado sueño.

— Abrazame.

Nayeon claramente hizo caso, porque es bien gobernada la niña.

7 días sobreviviendo 𔘓 minayeonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora